VISIÓN INTERDICIPLINARIA
Las grabaciones que se han ventilado de Lorenzo Córdova, presidente del Instituto Nacional Electoral, sobre el lenguaje despectivo que alude a un líder indígena, deja entrever los siguientes puntos;
1.- Que existe una estructura técnica capaz de hacer espionaje a diversos personajes que pueden representan un factor de peso para ciertos intereses. Pero en realidad en un país en donde la corrupción permite la venta de la base de datos del INE en el mercado negro, lo anterior es lo más sencillo del mundo y se ha hecho desde hace muchos años.
Entonces lograr grabar las conversaciones privadas no es tan complicado; en nuestro país siempre ha sido muy accesible comprar información de las comunicaciones particulares de la esposa o de un poderoso candidato. Ahora bien, seguramente hay grupos poderosos asesorados por “especialistas de seguridad corporativa” que tienen a su disposición esta información para convertirla en verdaderas armas políticas para pulverizar a personajes estratégicos.
Si bien Lorenzo Córdova refiere que es una ilegalidad la filtración de las comunicaciones privadas es totalmente cierto, pero como lo decimos siempre se ha hecho y difícilmente es castigado. El clásico “me llegó” de manera anónima la información es una simulación a la obtención ilícita que muchos hacen de esta actividad.
2.- Es verdad que el funcionario mantiene una conversación informal y privada y no tiene validez legal, pues no está plasmada en documentos oficiales o en eventos públicos, pero es indiscutible que una conversación privada deja ver la personalidad y juicios de valor del que las emite, por lo tanto carece de consecuencias jurídicas pero no de consecuencias morales.
El problema de la discriminación en México sigue siendo lastimoso, sobre todo a lo que se refiere a los grupos indígenas. El desprecio a la clase popular pobre por una clase política y poderosa es reiterativa y pública sin tener consecuencias más que la indignación popular por las redes sociales. Por lo anterior resulta muy desafortunado de que el presidente de una organización que ha costado mucho esfuerzo formar y sostener económicamente para el país como el INE que busca avanzar en el lento progreso democrático de México se exprese con ese talante de burla. El presidente Lorenzo Córdova ostenta un puesto de gran relevancia y responsabilidad social que demanda de legitimidad para el que la encabece, y la actual situación sin duda le restará credibilidad y autoridad moral para enfrentar con la cara en alto las embestidas contra la democracia que se construye.
Por lo anterior veremos en el futuro inmediato si es posible para el presidente del INE librar el penoso incidente, o bien la sociedad sentida y sobre todo los grupos indígenas no olvidan el agravio y no se incorporen a los acuerdos nacionales. En mi opinión es difícil para el funcionario y la institución que representa desempeñarse con la aprobación social y respaldo que requiere después del hecho, aunado a las críticas de sectores sociales e intelectuales que le han hecho con anterioridad a su gestión, tendrá que hacer una muestra gigantesca de buen desempeño y oficio democrático como no pasar las violaciones del partido verde con un castigo ejemplar, al igual que a otros personajes por muy poderosos que sean.