Desde la Tribuna

Después del partido entre México y Estados Unidos en el que el conjunto nacional logró ganar el “campeón de campeones” de la CONCACAF – de “panzazo, como buenos mexicanos- y aseguró su lugar en la próxima Copa Confederaciones, que se va a realizar en Rusia en el 2017.

Además del mérito deportivo que merece participar en el torneo internacional de antesala al mundial, esta victoria ha regresado a primero plano otras puntos que tal vez estaban olvidados o que no son notados por el aficionado normal; pero como nosotros no somos aficionados normales – y nos encanta “la pelea”- vamos a analizar estos puntos: el pasado, el presente y el futuro de lo que representa para la selección mexicana, para la afición y para el futbol en general esta clasificación.

Como dicen por ahí: “Empecemos desde el principio”. El partido en sí nos recuerda que el nombre del juego es ganar. Todas las estrategias, todas las prácticas y todo lo que gira en torno el futbol, es para ganar- como en cualquier deporte- y esa meta se cumplió el sábado, en tiempos extras con un gol de Paul Aguilar. A final de cuentas se logró el cometido y mientras eso pase, el cómo se logré pasa a un plano de menor importancia, la pregunta es : ¿jugó bien la Selección Mexicana? La respuesta puede ser difícil: lo hizo lo suficientemente bien para ganar, pero no aplasto. Jugo lo que necesitaba para derrotar a E.E.U.U., pero dejó ver que aún estamos lejos del nivel que deseamos.

El resultado muchas veces nos ciega de otros puntos de análisis – basta ver los programas de televisión con “expertos” para darnos cuenta de esto- que a final de cuenta encubren otras verdades.

Nuestro futbol es precisamente como un estudiante de secundaria. A un muchacho o muchacha que estudia en este nivel, se le exigen resultados en la escuela. Esto difícil porque personalmente atraviesa una etapa difícil, está en busca de su identidad, de su lugar y ese cambió hormonal lo deja como un individuo difícil de tratar; sin embargo, la exigencia es una: calificaciones y ser una persona respetuosa. Si el joven tiene excelentes calificaciones, la gente tiende a ignorar si “es buena persona” o si “es educado” porque es una persona de buenas calificaciones. Muchas veces, si su promedio es bueno en la escuela, los padres no se detendrán a analizar cómo lo logró, tal vez hizo trampa. Tal vez está logrando un buen promedio, pero no está aprendiendo nada.

La selección mexicana es igual. Muchos vemos la calificación, el resultado; porque eso es lo que importa a final de cuentas, pero no nos damos cuenta que ese equipo-con problemas de identidad y de comportamiento- tiene otros problemas que no están siendo atendidos, en pocas palabras- así como a los chavos de “secu”- cuando salen bien, los felicitan y nadie los pela después, cuando salen mal es cuando nos preocupamos y tratamos de solucionar las cosas.

Es por eso que ahora que la selección tuvo un buen logro, tenemos que darnos cuentas que no todo es “miel sobre hojuelas” y que el equipo sufrió para ganarle a un equipo que tiene más mentalidad y carácter que el mexicano. Nuestro futbol siempre ha carecido de eso que a los “gringos les sobra y es lo que el nuevo técnico de la Selección tiene que implementar.

Hablando de Directores Técnicos nuevos, Juan Carlos Osorio es el nuevo “mandamás” en la escuadra mexicana. Bajo muchas críticas, el colombiano toma las riendas de un caballo difícil, que vio en Ricardo Ferretti un buen Jinete y estará encargado –Osorio- de llenar unas botas muy grandes – sobre todo que son botas “tribaleras”, de esas que tienen la punta exageradamente larga, con eso de que el Tuca es de allá de Monterrey”- y desde ya, existen personas que piden su despido.

Por un lado, estoy de acuerdo en que tal vez Ferretti o Vucetich serían mejor opción, por el conocimiento del medio y de los jugadores, aunado a que son excelentes estrategas y que han demostrado su capacidad en muchas ocasiones. Por el otro, me da hasta risa escuchar a algunos comentaristas y “expertos” dar comentarios tan “sin sentido” que empiezo a cuestionarme si de verdad saben de lo opinan o solo hablan por hablar, vamos a ver unos ejemplos: “En México hay 5 o 6 mejores técnicos que Osorio”. Este país tiene buscando un técnico bueno desde Ricardo LaVolpe- y eso que a muchos no les gusto su trabajo, desde 2006 ha habido 8 diferentes técnicos de nuestra selección (contando interinatos y quemas de uno dirigió en dos o más periodos) Si hay tantos excelentes técnicos en el país ¿por qué no los ponen? Es como llegar si nos piden llegar a casa con un pastel, comprarlo y al entrar por la puerta nos digan “en el referí hay por lo menos 3 pasteles más ricos que el que traes “¿Cuál sería su respuesta? Exactamente eso que usted pensó, es lo mismo que yo pienso cuando escucho este “súper análisis”.

Una más “¿Qué ha ganado Osorio, cuáles son sus méritos para estar en la Selección? El señor Juan Carlos Osorio ha ganado 8 títulos en Estados Unidos y en Colombia, siendo en su país natal donde ha destacado más, dirigió a uno de los históricos de Brasil y fue asistente técnico del Manchester City. Cabe mencionar que es un técnico tipo A, el mayor grado que entrega la UEFA (la federación de fútbol Europa) y que tiene un título universitario en Ciencias del Ejercicio Físico y del Rendimiento Humano y una especialización en Ciencias Superiores del Fútbol de la Universidad de Liverpool, ¿son estas las credenciales más impresionantes? No ¿es un palmarés superior al de cualquier técnico en México? Tampoco; sin embargo, sí podemos darnos cuenta de que es una persona preparada, que sabe lo que hace, que tiene estudios específicos para ser técnico y que tiene una excelente reputación como dirigente.

Si nos vamos a que los “méritos” que tiene nos suficientes porque “no ha ganado nada importante” entonces Miguel Herrera, José Manuel De La Torre, Efraín Flores y hasta el mismo Aguirre, cuando fueron seleccionados para dirigir al conjunto Azteca, tenían un palmarés – y lo siguen teniendo- inferior al de Osorio, entonces yo no sé de qué me hablan cuando dicen que no ha ganado lo suficiente, o tal vez personas como David Medrano o Carlos Guerrero piensas que ganar 1 sola copa en México vale más que ganar 6 en cualquier otro país. Pero así de desubicados somos los mexicanos.

He escuchado a estos periodistas, y a muchos otros en canales de televisión de paga, darlos argumentos más insostenibles del mundo, y así pretenden que se les tome en cuenta. No es por defender a Osorio, porque como ya nos dimos cuenta: si da resultados, a todos se les va a olvidar y sí no los da, entonces todos dirán “yo tenía razón”. Como siempre lo hemos dicho, nuestro deporte es a final de cuentas, el reflejo de nuestra sociedad.

La única opción que nos queda es permanecer a la expectativa y “desde la tribuna” ver como nuestro adolescente- la selección mexicana- sigue madurando y esperaremos a que las buenas calificaciones vengan acompañadas con buenas actitudes, que supere los comentarios sin fundamento” y que logre graduarse satisfactoriamente en la Copa Confederaciones y encuentre lugar en el Mundial de Rusia en el 2018.