EXISTEN DOSIS DE MISOGINIA POLÍTICA.

La defensa de los derechos femeninos está convertida sólo en bandera política con fuertes dosis de misoginia, no sólo en el lenguaje, sino hasta en el oficio político.

Luciano Jimeno Huanosta, presidente de la Comisión de Derechos Humanos de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF), dijo lo anterior.

El legislador precisó que “si en los hechos estamos por la emancipación de la mujer, lo demostremos con el combate a prejuicios en la cultura política e impulsemos la competencia de las mujeres por la jefatura de gobierno, las gubernaturas estatales y hasta por la presidencia de la República”.

No esperemos hasta el 2018 que las figuras femeninas que han competido, tenemos talento para derrochar, pensemos en 2016.

Animemos y respaldemos a las mujeres para que vayan por Oaxaca, Veracruz, Sinaloa, y todas aquellas entidades en las que habrá Contienda polítíca.

No dejemos que en estos lugares sean los supuestos “usos y costumbres” los que frenen su desarrollo. Ni que en la capital del país la ambición masculina sea la que sepulte las capacidades femeninas.

Debemos personificar la grandeza de la mujer, no sólo con la agenda pendiente para eliminar todas las prácticas nocivas que la victimizan como el trabajo doméstico no remunerado o la explotación sexual, sino quitando los lastres en nuestros partidos políticos que les impide ejercer su derecho a competir.

Exhortemos también a aquellas mujeres que son las enemigas de su propio género, a que concilien y dejen de luchar internamente para auto cancelarse los derechos, porque una ley no es suficiente para hacer valer sus garantias.

El cambio político, legal y gubernamental, no pueden ser sólo hechos mercadológicos; más que leyes, conquistas y compromisos, impulsemos respeto y ejercicio absoluto a sus derechos, precisó, porque estamos ante iguales.

Durante la sesión solemne para conmemorar el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, precisó que no podemos esperar otros 15 años para que se cumpla la agenda mundial que marcó la ONU este 25 de septiembre, para estas nuevas batallas por venir necesitamos quijotescas mujeres, de esas que se narran en las obras de Miguel de Cervantes, exigiendo autonomía en un mundo asfixiante.