BAJA CALIFORNIA, ÚNICO ESTADO CON LEGISLACIÓN SOBRE CIELOS OSCUROS

A nivel nacional, Baja California es el único estado que tiene una legislación que protege los cielos oscuros.

Empezó como un reglamento municipal, en Ensenada, y después se convirtió en ley estatal, explicó el coordinador de la Investigación Científica de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), William Lee Alardín.

“Un comité técnico asesora al gobierno a nivel municipal. Participan autoridades de gobierno, sociedad civil, instancia académicas y centros de investigación, quienes vigilan que se aplique la norma como se debe, y en particular, sobre cómo deben ser las luminarias para que sea eficientes, que tengan pantallas, para que la luz no vaya para arriba sino para abajo.

Otro aspecto es en el color, porque la luz una vez que se emite, el polvo también la refleja, entonces aumenta el brillo del cielo.

De este modo, el comité tiene una tarea técnica, revisar que lo que se instala cumpla con ciertas normas que fueron puestas por razones primordialmente astronómicas y energéticas en términos de la eficiencia, ese es el meollo de la ley y también crear conciencia desde el punto de vista del cuidado al medio ambiente”.

Comentó que la sierra de San Pedro Mártir, Baja California, tiene características que la colocan entre los mejores lugares del mundo en cuanto cielos oscuros, “porque hay poca población, entonces se ha mantenido oscuro pero los asentamientos humanos del país crecen y el desarrollo aumenta y es algo que activamente hay que prevenir antes de que se convierta en un problema. Y esto se puede hacer”.

El exdirector del Instituto de Astronomía de la UNAM agregó que existen otros estados interesados en esta legislación, como Sonora.

“Mientras más se haga, más conciencia se va a crear sobre este tema a nivel nacional. Sería benéfico para todos. Yo creo que este es un claro ‘ganar ganar’ si se hace bien. No hay razón para que no sea haga, pues se evita una preocupación fundamental de pérdidas en los terrenos educativo, económico, científico o social. Si se hace bien, es un ‘ganar ganar’ para todo mundo”, insistió.

Para el maestro y doctor en física por la Universidad de Wisconsin-Madison, los cielos oscuros son un patrimonio que hay que proteger, “es una labor preventiva que se tiene que hacer ante la sociedad, y en los sitios que están todavía oscuros que desafortunadamente son cada vez menos”.

Detalló que para evitar la contaminación lumínica es necesario remplazar las luminarias públicas periódicamente –típicamente son ciclos de 5, 10 años, ya que no duran para siempre- instalar equipos más baratos y eficientes que consuman menos energía y con ciertas características técnicas como son el apantallamiento y el color de la luz.

A mayor contaminación lumínica más obstáculos enfrenta la investigación astronómica, ya que el brillo del cielo aumenta, “entonces no se pueden ver objetos tan débiles, los objetos astronómico son débiles, porque son intrínsecamente débiles y están cerca o porque son muy brillantes y están muy lejos, entonces (la contaminación lumínica) limita la capacidad de observación, la clase de observaciones que se pueden hacer. A la astronomía le afecta muy directamente, pero no es la única afectación”, enfatizó Lee Alardín. A nivel mundial, existen lugares privilegiados con cielos oscuros como Hawai, Las Canarias, Chile y México.

El integrante del Sistema Nacional de Investigadores nivel III, señaló que la región con más contaminación lumínica es el centro del país: “En un lugar como la Ciudad de México usted puede contar las estrellas con los dedos de la mano y casi le sobran”. En las grandes ciudades es más común la contaminación lumínica.

“La conservación de los cielos oscuros es fundamental para los centros culturales de la astronomía, de la educación, el desarrollo de ciencia y tecnología, y el bienestar de la población y medio ambiente”, dijo el actual líder de la investigación científica en la UNAM.

Del 20 al 22 de enero, en la Ciudad de México se llevó a cabo la Reunión Internacional por el Derecho a los cielos oscuros, evento organizado por la Oficina de la UNESCO en México, el Foro Consultivo Científico y Tecnológico, el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología, la UNAM y la Academia Mexicana de Ciencias. Las propuestas serán publicadas en las próximas semanas en un informe oficial.

Lee destacó la importancia de que el tema llegue a los legisladores, que valoren su importancia y tomen las acciones pertinentes, porque es algo que merece atenderse.

“Desde la UNAM, vamos a apoyar las iniciativas que surjan de esta reunión, por supuesto, para que se haga conciencia y se tomen acciones y también a colaborar en los asuntos internacionales que se buscan”, finalizó Lee.