VIGILARAN CONSTRUCCIÓN DEL NUEVO AEROPUERTO

La Comisión Especial sobre el Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (NAICM), se encargará de vigilar que el proyecto se ajuste a costos, tiempos y especificidades técnicas ofrecidas por el gobierno, el cual está cada vez más cuestionado respecto a su eficiencia y honradez

El Diputado Federal Rafael Hernández destacó que la Auditoría Superior de la Federación (ASF) de la Cámara de Diputados ya detectó irregularidades en la Cuenta Pública 2014, específicamente en cuanto a la contratación de mano de obra con pagos mil 360 por ciento por encima de los prevalecientes en el mercado, aún sin haber iniciado los trabajos de construcción.

Además, según declaraciones de funcionarios de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCyT) y de empresarios involucrados con el proyecto, el costo total ya se elevó casi 20 por ciento tan sólo por la devaluación del peso, por lo que pasó de 169 mil millones a más de 200 mil millones de pesos.

Recordó que esta obra, tal como se le prometió a la ciudadanía, es la más grande y costosa de varias décadas a la fecha en nuestro país y es muy probable que, por la mediocridad en que este gobierno mantiene a la economía nacional, siga sin crecimiento significativo, que los insumos necesarios carezcan de mayor contenido nacional y que crecientemente deban importarse y cotizarse en dólares, lo que significara un gasto mayor en pesos.

Frente a un gobierno cada vez más cuestionado nacional e internacionalmente por su deshonestidad en el manejo de recursos públicos, deshonestidad que incluso ha tenido saldos trágicos para las personas, el medio ambiente y la nación, insistió en que el Congreso, en este caso la Cámara de Diputados, no puede quedar al margen ni desentenderse de sus facultades y obligaciones constitucionales.

Hernández Soriano enfatizó que la tarea fundamental de la nueva Comisión que encabezará será precisamente dar seguimiento a que este proyecto estratégico sirva al desarrollo de la Megalópolis a costos justificables, sin mayor depredación del medio ambiente y con beneficios para las miles de familias asentadas en torno a la actual terminal y las que ya se asientan en inmediaciones del nuevo.

El representante popular por el Distrito XI de la Ciudad de México y, por tanto, de quienes habitan en torno a la actual terminal aérea, demandó realizar consultas en cuanto a la futura mudanza del aeropuerto y sus impactos, pues serán afectados en cuanto empleo, servicios, infraestructura urbana y medio ambiente.

Se trata de que el NACM no sea, en última instancia, un beneficio para unos cuantos empresarios y políticos, como parece ser la tendencia que descubre en sus revisiones, aunque indirectamente, la ASF respecto a la Cuenta Pública de 2014, sino para todos.

En tal sentido, el parlamentario perredista confió en que, además de honradez, haya la necesaria y suficiente coordinación y responsabilidad entre los ejecutores del proyecto con los gobiernos federal, capitalino, mexiquense, municipales y delegacionales para evaluar, anticipar y responder a los impactos económicos, ecológicos y sociológicos en cada una de las etapas de las licitaciones.

Exhortó a Aeropuertos y Servicios Auxiliares (ASA), a la Comisión Nacional del Agua (Conagua) y al Grupo Aeroportuario de la Ciudad de México (GACM) a aclarar las observaciones de la ASF, a justificar plena y legalmente los recursos públicos puestos a su disposición, a devolver lo que no está autorizado ni justificado, y a fincar las responsabilidades a quienes los hayan malversado.

Recordó que a ASA se le autorizaron en abril de 2013 más de cuatro mil 97 millones de pesos más IVA del Fondo Nacional de Infraestructura (Fonadin) para estudios y obras iniciales, de los cuales tres mil 415 millones de pesos fueron sólo para estudios y proyectos ejecutivos.

De los mil 502 millones de pesos asignados a ASA en 2014, el 99.4 por ciento fue transferido al Fideicomiso para el Desarrollo del NAICM. Con estos recursos se asignó directamente un contrato a la “Gerencia del Proyecto para Atender la Demanda de Servicios Aeroportuarios en el Centro del País”, instancia que “infló” los sueldos hasta mil 360 por ciento.

Además de otras irregularidades en ASA, la ASF también encontró irregularidades semejantes en GACM y en Conagua, aunque en este último caso respecto a trámites sobre uso de suelo para la construcción de túneles en territorio de la Ciudad de México y el Estado de México.