LA POLÍTICA…CON VISTA AL MAR
REPRUEBAN A JAVIER DUARTE LOS VERACRUZANOS
Con el arribo de la generación de los “ladrones más veloces”, fueron para algunos la panacea en la justificación de que todo está permitido; el enriquecimiento y la arbitrariedad, el espacio de poder sin escrúpulos, se convirtieron en cánones que definieron el comportamiento de muchos que esperaban y obtuvieron y los que aún esperan que algún día sea su día para reproducirse en el pinche poder con todo lo que ello implica.
Los señalamientos hacia el actual gobierno son muestra palpable de los niveles de descrédito que este ejercicio le supone a las mayorías. Algunas encuestas sitúan la aceptación del gobernador en tan solo en 3.8 puntos y sigue en picada. En el tobogán de los desprecios, la lectura del porqué es fácil; nunca como ahora se ha manifestado con tal descaro la ineficiencia, la omisión de responsabilidades y los malos manejos hachos por alguna administración, nunca como ahora el miedo, el terror por la violencia y la inseguridad, nunca como ahora la profundidad de la descomposición gubernamental.
Ahora mismo muy pocos o casi nadie, incluidos los incondicionales por interés, salen en defensa de un gobierno que concentra y es referente de señalamientos de lo más indeseable de cualquier ejercicio gubernamental. Sumido en el desprestigio, lanza aún los coletazos de su moribunda actuación, aún faltan algunos meses para su final y tiene controles y convenios que pueden marcar el derrotero de su linaje partidario, no quiere dejar la idea de que todo lo tiene perdido.
Si para la oposición la normalidad de señalar las trapacerías y los horrores veracruzanos es la línea, ahora el candidato del partido gobernante tiene que asumir los costos de las condiciones en las que vivimos. En este gobierno y principalmente en su ejecutivo tiene sin duda su mayor adversario, caminando en su laberinto tricolor es prisionero de las notas malas que día a día surgen por doquier en la entidad, pareciera no tener escape, pareciera solo tener de dos, o se colude o señala y refrenda su compromiso por marcar distancia y ser “ladrón veloz” que cual señores feudales ofrecen o no las alianzas de la complicidad
La pesada ancla de los resultados de los últimos gobiernos y el hartazgo social que sobre ellos pesa puede ser el elemento que hunda al anacrónico y soberbio priismo veracruzano el próximo 5 de junio. Su candidato busca desmarcarse y es comprensible, sin embargo se requiere mucho más que argumentar en primera persona sobre las diferencias, el sentimiento social envía mensajes de una incredulidad y de un enejo que han hacho más complejas y complicadas las formas de contenerlas con las viejas prácticas. Esperemos y veremos que tanto las dolencias sociales manifiestas se hacen concretas.