NECESARIO BAJAR EL PRECIO DE LA GASOLINA
En México hay cinco millones de vehículos circulando en éste momento y su fuente indispensable de movimiento, son la gasolina magna ó premium ó el diésel; los cuales provienen del petróleo que desde 2012 ha mantenido una racha decreciente en el precio promedio anual de la mezcla mexicana, esto ha generado importantes consecuencias en el bolsillo de las familias mexicanas, ya que su costo ha aumentado hasta un 30% en los últimos años.
El problema principal, de acuerdo con Torreblanca, no es solamente para quien usa el automóvil como un medio de transporte en la ciudad, si no que el aumento en los costos de los combustibles, nos afecta a todos debido a que productos de la canasta básica, medicamentos y entre otros productos que se transportan justamente por vehículos que dependen de alguno de los tres principales combustibles: gasolina magna ó premium y diésel.
Esta medida no afecta únicamente a las personas que tienen automóvil "nos impacta a todos, a todas las personas que consumimos alimentos, a todas las personas que consumimos bienes y servicios porque ese aumento indiscriminado en el precio de las gasolinas, acaba de impactando en el precio del consumidor final”, señaló el diputado.
Por otro lado, alertó que el Gobierno Federal pretende que por la vía de la aprobación de su propuesta de paquete económico para el 2017, se dañe aún más los bolsillos de las familias mexicanas en este mismo rubro, debido a que la actual propuesta del presupuesto, contempla la liberación del precio de las gasolinas, lo que llevaría a que el combustible pueda aumentar casi a los 20 pesos por litro.
Finalmente Torreblanca hizo énfasis en que de pasar su reforma, el recurso no impactaría las finanzas públicas puesto que para la citada propuesta se lleve a cabo se necesitan 142 mil millones de pesos, recurso que se le puede reducir al presupuesto del Poder Judicial de la Federación quien en este paquete económico tiene proyectado recibir un aumento de 12 mil millones de pesos en su presupuesto aunado a los gastos de comunicación social de la presidencial, rubro de la administración federal que implican 15 mil millones de pesos, el legislador puntualizó yo creo que “la gente prefiere tener un beneficio en sus bolsillos y una baja inflación a estar viendo anuncios del gobierno federal que no sirven de nada.”