Favorecer e impulsar desarrollo de la mujer
No obstante que se han creado nuevas e importantes leyes para eliminar la violencia contra la mujer, en nuestro país es un hecho que las mujeres suelen ser víctimas de diversas formas de violencia a manos de sus parejas, familiares, sus empleadores, así como de otros actores o hasta de manera institucional.
La Diputada del Partido Verde Ecologista en la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF), Eva Lescas Hernández, recriminó que los autores de violencia contra las mujeres atribuyen su comportamiento a la pobreza, el desempleo, problemas de drogadicción y alcoholismo, sin embargo, sostuvo que ninguna razón justifica el maltrato de mujeres y niñas dentro del seno familiar o en la comunidad.
En el Día Internacional de la Mujer, la legisladora del Partido Verde en la Asamblea Legislativa, enfatizó que las agresiones contra la mujer no son sólo manifestaciones de relaciones de poder desiguales, abusivas e injustas. “También constituyen la forma más abusiva de victimización de que son objeto las mujeres durante toda su vida y afecta a pobres, ricas, mujeres de ciudad y rurales, así como de todos los grupos étnicos”.
En este sentido, reconoció que las mujeres campesinas son víctimas de un sistema económico-político de discriminación, explotación y exclusión, y denunció que las trabajadoras apenas logran un ingreso semanal de 400 pesos por jornada laboral de 12 horas diarias.
Detalló que la Encuesta Nacional Sobre Violencia Contra las Mujeres de la Secretaría de Salud revela que en las relaciones de noviazgo tres de cada diez adolescentes en México denunciaron haber estado en una relación violenta; y el 7.5 por ciento de las muertes de sexo femenino mayores a los 14 años en la Ciudad de México fueron homicidios dolosos, de los cuales, el 69 por ciento fueron cometidos por esposos o familiares.
“La mujer es el grupo excluido más grande del mundo y padece toda clase de marginación”, recalcó, al asegurar que las reformas a la legislación federal y local, permiten que la comunidad femenina se desenvuelva en un ambiente de progreso y dignidad, así como para que la sociedad mexicana reconozca los derechos de las mujeres que viven en esas condiciones y tengan las mismas oportunidades que los hombres.
Frente a esta realidad, la vicepresidenta de la Comisión de Desarrollo Rural, finalmente pidió a la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano y a la Secretaría del Trabajo capitalina, informar sobre la situación actual de las mujeres que laboran en las zonas rurales de la Ciudad de México, los programas en su beneficio y las acciones realizadas para evitar la discriminación salarial y explotación laboral.
“Debemos eliminar cualquier tipo de violencia de género, como condición indispensable para el desarrollo individual y social de la mujer y su plena e igualitaria participación en todas las esferas de la vida”, concluyó.