Lo crucificaron
Fatigado, con su rostro bañado en sangre por la corona de espinas que le colocaron los soldados en la cabeza, su cuerpo ensangrentado y su ropa desgarrada por los latigazos que iba recibiendo para obligarlo a caminar y con la Cruz a cuestas, Jesús llega al “Monte Calvario” ayudado por uno de los nazarenos.
Bajo los candentes rayos del sol, la gente no se perdía de un solo detalle, y una vez más presenciaron la escena teatral la más grande el mundo y la más vista en un solo día por millones de personas, allí presentes o por televisión, y que por 174 años se pone en escena.” “La Vida y Muerte de Jesucristo”, en la delegación de Iztapalapa.
Jesucristo fue atado a un madero para recibir los latigazos por los saldados y le colocaban la corona de espinas en la cabeza,
Eran las 14.55 horas cuando el Nazareno cargo la cruz con un peso de 90 kilos, iniciando su “Vía Crucis”, con rumbo al Cerro de la Estrella, donde los Nazarenos, colocaron sus cruces a la falda del cerro para honrar a Jesucristo.
Atado con una cuerda al cuello, jalado por uno de los soldados, como si fuera animal, otro de los verdugos golpeaba con su látigo a Jesús quien a mitad de camino ya mostraba fatiga, y al caer por primera vez, le apretaron más la corona de espinas, para que sintiera mayor dolor.
Con rumbo a la muerte, miles de personas iban adelante, atrás y a los lados de él, algunas personas caminaban tristes al ver como lo trataban los soldados.
Mujeres de avanzada edad, lloraban cuando Jesús caía al piso candente y era levantado a latigazos por los soldados.
A pesar de la valla humana que se colocó a lo largo del camino por donde el Nazareno iba rumbo a la crucifición, Jesús se atropellaba entre la gente que se encontraba a su paso.
La muerte ya le asechaba a Jesús, el sol se metía, poco a poco se nublaba, el viento soplaba y cuando el Nazareno fue crucificado, gotas de lluvia se sintieron caer, y al unísono la gente dejo escapar una muestra de angustia, dolor y muerte, todo había acabado.
La escenificación de la “Vida y Muerte de Jesucristo” inició al filo de las ocho horas de la mañana con el recorrido para la “174 Representación de la Semana Santa Iztapalapa 2017”.
Fueron más de cinco mil personas quienes escenificaron “La vida, pasión y muerte de Jesucristo”,
Durante la escenificación, miles de niños de niños, adolescentes y adultos, vestidos como nazarenos y cargando su cruz, construida con sus propias manos, y llevada a cuestas hasta el Cerro de la Estrella, “El Monte Calvario”.
Cientos de turistas nacionales y extranjeros presenciaron la “La Vida y Muerte de Jesucristo”, los nativos de los ocho pueblos de Iztapalapa muestran su felicidad por que los niños continuarán con esta tradición, y participando.
Como parte de las celebraciones de jueves Santo, comenzaron a partir de las 15:00 horas la peregrinación conocida como la Visita de las Siete Casas por los templos más emblemáticos del lugar, por lo que los visitantes se colocaron en las aceras principales para ver el paso de quien fuera el hijo de dios.
Dicho recorrido tiene la finalidad de que la población de la demarcación conozca a los actores que año con año representan la vida, pasión y muerte de Cristo, por lo que voluntarios evitaron que se invadiera el arroyo vehicular.
Alrededor de las 17:00 horas el grupo actoral arribó al Santuario del Señor de la cuevita donde comenzó la tradición popular, en el cual fueron bendecidos los actores que han participado durante la importante fecha, para salir a caballo del antiguo templo colonial.
Después, alrededor de las 20 :00 horas en la Macroplaza Cuitláhuac, justo en frente de la sede delegacional, se representaron los pasajes bíblicos más importantes como las salida de los apóstoles al cerro de la Estrella, la última cena, el lavado de pies, la traición de Judas y la reunión de los cercanos al hijo de dios, actividades representadas por artistas no profesionales, en su mayoría residentes locales.
Más adelante el contingente se dirigió rumbo al Cerro de la Estrella para continuar con la representación de más pasajes bíblicos, entre ellos la entrega de Jesús a centuriones romanos, su captura y por supuesto uno de los pasajes más representativos, el suicidio de Judas.
Finalmente los participantes regresaron a la mayordomía del lugar para descansar y prepararse para las actividades de este Viernes Santo.