¿Honestidad Valiente?

Juan 2: 15-17 "No améis al mundo ni las cosas en el mundo… Si alguno ama al mundo, el amor del Padre no está en él porque todo lo que hay en el mundo, como los deseos de la carne, los deseos de los ojos y la soberbia de la vida, eso no proviene del Padre, sino del mundo y el mundo pasa, y sus deseos; pero el que hace la voluntad de Dios permanece para siempre".

Ilustra esta descripción -muy usual en el clero-, las acciones del mundano “intelectual” y fundador de la famosa frase “Honestidad Valiente”, y con base al uso de un término de la Biblia, desenmascarar, por enésima ocasión, que Andrés Manuel López Obrador no solo se ha convertido en un frívolo y puritano político sucio que por sistema ha venido engañando a todo mundo, sino con sus propias acciones y de terceros para supuestamente “combatir” la corrupción, se reafirma que nunca ha dejado de ser “¡un peligro para México!”

Con base a la serie de investigaciones que agentes políticos integrados al Congreso, así como periodistas críticos que han librado toda una guerra de papel para derrumbar los castillos de pureza del Mesías de Macuspana, se ha creado, a la vez, un ambiente raro en todo el país, y se especula insistentemente que Andrés Manuel tiene sus horas contadas de vida (…) porque al considerarlo “¡un peligro para México!”, se repetiría la historia del malogrado Luis Donaldo Colosio, muchísimos de sus detractores ya quisieran, postrados desde los pórticos de sus residencias, observar el desfile de su cortejo fúnebre (…)

Sin embargo, López Obrador de forma inteligente ha marcado hasta la agenda política nacional en la víspera de las elecciones tanto locales y federales para este 2017 y 2018, sin caber la menor duda que el sistema gubernamental lo encausó para descorrer su telón de corrupción que siempre le ha imperado dentro del quehacer político mexicano.

Desde cuando era asaltador de caminos y huachicolero en el paro de pozos petroleros, continuamente se ha victimizad, haciendo creer a la gente que “todos” lo quieren “atacar”. Hasta con eso... crea un halo de purezas “sin romper un plato” para que la sociedad se conduela y lo apoye. Pero… ¡ya basta! de tantas farsas, dicen por ahí.

Sus castillos de “moralidad” se han venido desmoronando espaciosamente que al final de su camino, tendrá que irse a descansar mucho a su rancho La Chingada, nomenklatura que él mismo le aplicó y cuya ésta última palabra, es recogida utilizada por la elite de la sociedad de la extinta Unión Soviética.

Su partido, MORENA, tiene grandes responsabilidades y ocupar posiciones “administrativas” claves de un autogobierno pejista que actúa con saturamiento de acciones corruptas, como es el caso de Eva Cadena, una de las operadoras pedinches financieras que recauda emolumentos ya sea del erario federal y de particulares, en un afán siniestro por mantener una catadura putrefacta que detona contra el desarrollo de la propia sociedad.

Si bien se ha conservado la idea que “la sociedad avala las acciones de deshonestidad de López Obrador”, éste ha instaurado y copiado burdamente un sistema al muy estilo soviético y siciliano, donde enlista a cómplices que con la “recomendación y sello” de Andrés Manuel López Obrador, sus huestes asisten a entrevistarse clandestinamente con agentes poderosos del dinero a fin de pasarles la charola y cuyos enviados se ven obligados a actuar de manera sigilosa para no solo entrarle al juego de la complicidad y la corrupción, sino hasta para delinquir llevándose parte de ese “botín de guerra”.

López Obrador, capo del establishment de la Mafia del Poder de la Izquierda rebelde, sediciosa, insurrecta, subversiva facciosa e insubordinada, ha influido en la sociedad como “ejemplo” pro-corrupción, con quien solo tiene cabida los corruptos y cuya nomenklatura identificada como “Movimiento de Regeneración Nacional” (conocido por su acrónimo MORENA), imaginariamente es un partido político mexicano de izquierda, pero desgraciadamente carece de principios rectores de transparencia, sino una imagen distorsionada, jocosa e histriónicamente lacerada, todo por mantener un férreo control y un “orden”, por extensión, preestablecido al estilo siciliano.

Al configurarse por ser el mundano exterminador de la “nueva época” de México, a 17 años de haber entrado al Nuevo Milenio, los usos y costumbres -se debe insistir-, paradójicamente “la sociedad avala las deshonestidades de Andrés Manuel” y a éste le ha permitido abrirse brecha para retar constantemente a todo el sistema del gobierno federal.

Ese tipo de operaciones políticas el pueblo las aplaude ante su incapacidad de protestar, porque el señor López ha despotricado desde siempre contra las instituciones que integran la Mafia del Poder oficial, llevando el sello de la crispación lopezobradorista.

Los botones de muestra están a la vista de todos, las acciones corruptas de Mr. Mesías, hacen entender que si llegara a ser Presidente de México, lo primero que haría sería retar al Congreso y desaparecerlo de un plumazo.

Ordenaría el arresto en contra de los ex presidente priistas y panistas, de empresarios, de sus oponentes que hicieron escarnio de él; las calles y avenidas del país se teñirían de sangre porque entre la sociedad, totalmente crispada, les permitiría ante el desorden cometer asesinatos, robar, saquear comercios, y en medio de toda esa zozobra, hasta declarar una zona de sitio, matando la vida nocturna del país.

De tal suerte que, mientras eso no suceda, y que supuestamente, como dicen los religiosos, “que Dios nos agarre confesados”, las peje-complicidades del Pinocho de Macuspana, brillan cada días muy intensamente.

Ciertamente, la prensa nacional ha establecido una cacería de corruptos para desenmascararlos, y entre los clientes favoritos está la gente de Andrés Manuel López Obrador, toda vez que la diputada local de Veracruz Eva Cadena, acusó a la coordinadora de Morena en la Cámara de Diputados, Rocío Nahle, como la “operadora financiera” directa de Andrés Manuel López Obrador para recaudar dinero y destinarlo al político tabasqueño.

Eso ya lo había dicho el político panista Diego Fernández de Cevallos, en el sentido que Andrés Manuel López Obrador “no toma dinero, tiene sinvergüenzas que lo llevan a su causa”.

Y en torno a los medios de comunicación, sobre todo en las redes sociales, se exhiben fundamentos de la forma en que personeros de Andrés Manuel López Obrador, reciben dinero de dudosa procedencia.

La persona que es diputada veracruzana y que se ha convertido en toda una celebridad y hasta “actriz” recibiendo dinero sucio, es Eva Cadena, ex candidata de Morena a la alcaldía de Las Choapas, quien en una acción políticamente revanchista, señaló que una mujer de nombre Rocío Nahle, es quien “le acerca los dineros a López Obrador”.