Capacitan operador

“No es la hora de lamentaciones, vamos a combatir la corrupción de manera frontal, sin tapujos, ni complicidades, porque la gente se siente agraviada y ya no cree en las instituciones públicas.

La magistrada presidente de la Asociación de Magistrados de Tribunales de lo Contencioso Administrativo de los Estados Unidos Mexicanos (AMTCAEUM), Yasmín Esquivel Mossa, afirmó que no es momento de lamentaciones ni de culpas, es momento de actuar y realizar acciones audaces que generen golpes de timón y con hechos, no con palabras,

mandar un mensaje claro: Vamos a combatir la corrupción de manera frontal, sin tapujos, ni complicidades con transparencia y de frente a la sociedad.

En la ceremonia del marco del “Inicio Formal del Programa Nacional de Capacitación para Operadores del Sistema Nacional Anticorrupción”, subrayó que la corrupción en el país se ha incrementado de forma desbordada en los últimos lustros.

En este sentido, expresó que esta situación ha provocado que los ciudadanos “ya no crean en las instituciones públicas y desconfíen de todo y de todos y miren con recelo y desilusión la política”.

Con la presencia del secretario de Educación Pública, licenciado Aurelio Nuño Mayer y la titular de la Secretaría de la Función Pública , Arely Gómez González, la también magistrada presidente del TCACDMX subrayó que la corrupción del gobierno es una de las situaciones que más ha agravado a la sociedad en los últimos tiempos.

En el Auditorio de la Secretaría de la Función Pública , la impartidora de justicia advirtió tajante que el Sistema Nacional Anticorrupción (SNA) es la última oportunidad que la sociedad “nos brinda para desterrar, de una vez y para siempre, esta funesta práctica que ha lastimado y desencantado a millones de mexicanos”.

Esquivel Mossa dijo que hoy enfrentamos una situación que resulta alarmante para nuestro desarrollo cono nación independiente, y eso es la constante pérdida de legitimidad de las instituciones gubernamentales provocado por la corrupción, que desgraciadamente afecta de manera directa a la credibilidad de las acciones gubernamentales.