Desarrollo social

El Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), informó a la Comisión Permanente que las metas establecidas en el Plan Nacional de Desarrollo en materia social tienen un rango de cumplimiento de entre 32 y 68 por ciento.

Se señala en el documentó que envió al Congreso denominado “Consideraciones para el Proceso Presupuestario 2018”, que se busca fortalecer la toma de decisiones en materia presupuestal, además de realizar un análisis sobre las prioridades, hallazgos y recomendaciones en materia de desarrollo social del Gobierno Federal.

En el texto se explica que se implementó un mecanismo llamado Sistema de Seguimiento de Indicadores de Programas Sociales (SIMEPS), que analizó si los programas sociales han cumplido sus objetivos y entregado bienes o servicios a sus beneficiarios, así como la revisión del comportamiento histórico de los indicadores sociales.

Se menciona que existen 25 programas del ámbito social que derivan del Plan Nacional de Desarrollo 2013-2018, los cuales en conjunto cuentan con 368 indicadores que brindan información sobre el desempeño de la política social en México.

Los resultados revelaron que 75 de los 368 indicadores tiene un desempeño adecuado, lo que implica que el porcentaje de cumplimiento de la meta sexenal se encuentra en un rango entre 32 y 68 por ciento.

Asimismo, se señala que 31 indicadores presentan un desempeño avanzado por encima de lo esperado en el cumplimiento de la meta sexenal y se encuentran en un rango de entre 68 y 120 por ciento, “por lo que seguramente estos indicadores alcanzarán la meta al finalizar la administración”.

En tanto, otros 52 indicadores ya rebasaron la meta planeada para 2018, se encuentran superados, por lo que es probable que estas hayan sido subestimadas.

Mientras, 109 indicadores presentan un avance inferior a 7 por ciento, es decir, se encuentran muy rezagados y rezagados, por lo que la probabilidad de cumplimiento de estas metas al finalizar la administración es baja.

El Coneval propuso la asignación de un presupuesto en materia social basado en resultados, lo que permitiría mejorar la eficiencia y calidad del gasto público, así como generar beneficios en el estilo de vida de la población, aumentar la seguridad pública, reducir la desigualdad, disminuir la pobreza, proteger los derechos de la niñez, eliminar la discriminación, entre otros.

Dicho organismo precisó que para asegurar que esos resultados se materialicen, es necesario contar con medios de medición como el SIMEPS, que identifiquen y den seguimiento a los avances en este tema.

Es fundamental medir constantemente la evolución de estos objetivos, ya que contribuye en la mejora de los programas y destaca los cambios presupuestales a realizar para optimizar su operación, incrementando así la calidad del gasto público, puntualizó.