El proyecto discordia Invadirá contaminante
El pasado 7 de noviembre los diputados de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF), protagonizaron una gresca en el recinto de Donceles cuando se discutía el dictamen para llevar a cabo el proyecto de construcción y operación de la Planta de Termovalorización "El Sarape", que a través de la combustión de residuos inorgánicos busca generar energía eléctrica destinada para el funcionamiento del Sistema de Transporte Colectivo Metro.
Para los morenistas el irregular contrato con Veolia compromete a la Ciudad de México a cargar con una deuda de 109 mil millones de pesos durante los próximos 33 años, mientras que para el jefe de Gobierno, Miguel Ángel Mancera, el proyecto no implicará mayo gasto para la capital que el que ya tiene por el manejo de la basura, incluso, advierte que a la postre se ahorrarán 12 mil millones de pesos.
Sin embargo, la organización ambiental Greenpeace ha señalado que, de acuerdo con el propia Manifestación de Impacto Ambiental de "El Sarape", la combustión de basura provocará una emisión adicional de contaminantes en una ciudad que ya sufre por la deficiente calidad del aire.
En su página de internet, Veolia México advierte que el dicho proyecto "representa una alternativa de tratamiento eficaz para los desechos, cumpliendo con la normatividad ambiental, los más altos estándares y las mejores prácticas aplicables a este tipo de instalaciones".
El boletín añade que la empresa ha operado en México desde hace 25 años y que anualmente "gestiona" 2.3 millones de toneladas de residuos sólidos en tratamiento y 800 mil en recolección, además de potabilizar alrededor de 500 mil millones de metros cúbicos de agua, "alcanzando más de 20 ciudades atendidas y 13 millones de usuarios en sus dos actividades".
En la Ciudad de México Veolia también realiza tareas de cobranza, atención al púbico, lectura, mantenimiento e instalación de medidores, mantenimiento al padrón y análisis de consumo de agua, así como tratamiento de aguas residuales y facturación en las delegaciones Azcapotzalco, Cuauhtémoc y Gustavo A. Madero,a través de concesiones otorgadas por el Sistema De Aguas de la Ciudad de México (Sacmex).