CHISPAS…
PRÓXIMO GRAN FESTIVAL INTERNACIONAL DE CINE JUDÍO EN MÉXICO
Buena noticia para el cinéfilo interesado en disfrutar en la pantalla grande producciones cinematográficas de otros países y distintas costumbres, nos referimos al Festival Internacional de Cine Judío en México (FICJM), a realizarse del 18 de enero al 7 de febrero de 2019, en México, con presencia en más de 17 sedes en 7 ciudades de la República Mexicana. Para no perderse las extraordinarias producciones cinematográficas del cine judío, nos envían nuevas sedes incorporadas en este año, entre las que figuran: Cinépolis. Plaza Toreo en Ciudad de México y Cinépolis Plaza Morelia. El Festival Internacional de Cine Judío en México (FICJM) dará inicio a su primera etapa del 18 de enero al 7 de febrero en Cineteca Nacional, centros, culturales, comunitarios y 17 sedes de Cinépolis; en esta ocasión el festival tendrá como invitados a dos directores mexicanos, que participaron con un documental en la Selección Oficial. También para este 16º FICJM el festival tendrá presencia tres semanas en la ya tradicional en la sede de Interlomas.
La Selección Oficial está conformada por 4 producciones israelíes, una comedia de Estados Unidos y dos co producciones de: Sudáfrica-Países Bajos y Canadá- México- Israel, de la cual habrá presencia de los directores del documental “Ser niño de nuevo”, Gabriel y Moy Volcovich.
El Festival Internacional de Cine Judío en México presenta su XVI edición, que gira en torno a la temática de una de las actividades, quizá más relevantes desde los principios de la humanidad: la migración; un fenómeno de movilidad cultural que ha dado como resultado las sociedades con sus virtudes y desaciertos.
Como semillas que llevan el viento y los pájaros, como las mariposas, los migrantes viajan a distintos puntos del globo. Muchas veces guiados por sus sueños o expectativas, otras veces como consecuencia de la economía, la geografía o las guerras. A miles de años de distancia, los primeros hombres que cruzaron el estrecho de Bering; los pueblos que tuvieron que huir de dominaciones imperiales.
Los migrantes que llegaban al nuevo continente a materializar sus sueños, son un símbolo de lucha y superación. A principios del siglo XX, el tema de la inmigración llega a la pantalla grande con producciones como la de Charles Chaplin, con su película “El Inmigrante” (The Immigrant, 1917), con una visión romántica de viajar a América, arribar por Nueva York y ver la estatua de la Libertad ya frente al puerto. Sin embargo, es esa una de las pocas escenas idealizadas.
Chaplin usa el recurso de los agentes de migración mal encarados, que dan un trato rudo a los migrantes, para hacer comedia. Es su actitud ante la adversidad, la que convierte las situaciones en comedia, pues el vagabundo que viene de Europa inventa cientos de trucos para salirse con la suya y escapar de la autoridad.
El inmigrante que nos presenta Chaplin es un pícaro que busca a toda costa integrarse a la nueva sociedad que está emergiendo en la América de los principios del siglo XX. Una persona que pese a sus circunstancias, es de un gran corazón y nobleza.
Quién mejor que Chaplin para contarnos esto, siendo el mismo un inmigrante europeo que llegó a Estados Unidos para abrirse camino. Más contemporánea y muy lejos de la idealización, está la visión de Alejandro González Iñarritu con su obra “Carne, huesos y arena”, que nos pone en los zapatos del migrante, a través de la tecnología de realidad virtual. Esta obra que combina la tecnología y la narrativa documental, es una de las nuevas herramientas para sensibilizar sobre el tema de la migración a nivel mundial.
Hoy más que nunca debemos de voltear a ver a esta situación en la que la migración es un Proceso natural y no una situación ajena a los seres humanos. El cine como una herramienta poderosa que nos ayuda a exponer asuntos de relevancia social y cultural tiene la fuerza para convocar y concientizar sobre este y otros temas que son importantes poner en la mesa de diálogo de todas las expresiones artísticas y educativas.
Es así como el FICJM realiza su aportación a través del cine, en su XVI edición, exaltando ante todo los valores de: cooperación, respeto a las diferencias y la libertad de expresión. ¡Por un cine sin límites! u n f e s t i va l s i n fronteras. Sugerencia para los amantes del Cine Judío, podrán disfrutarlo en las siguientes salas: la semana 1 (18 al 24 de enero). Cineteca Nacional (CDMX). Cinépolis Carso. Cinépolis Interlomas. Cinépolis Paseo Interlomas, Cinépolis Plaza Morelia. Semana 2 (25 al 31 de enero). Cinépolis Perisur, Cinépolis Interlomas. Cinépolis Diana. Cinépolis Parque Toreo. uente: FICJUDÍO.
El fenómeno global de la migración, es uno de los más Relevantes de los últimos años, de cara a la segunda década del siglo XXI, no por nada muchas de las películas (de cine no convencional) han dedicado su historia a temas que tienen que ver con la migración, la discriminación o la segregación racial. Tal es el caso de las películas que integran la selección oficial de la presente edición del Festival Internacional de Cine Judío en México (FICJM). Encabezando la lista de nuestras selección se encuentra: “El árbol de higo” (Israel) ganadora del premio por la mejor fotografía (2018) por la Israeli Film Academy y ganadora del premio del Eurimages Audientia Award del Toronto International Film Festival, al mejor director Alamork Davidian. Basada en la historia real de cientos de emigrantes judíos etíopes, que desesperados por la inacabable guerra civil deciden huir a Israel; la trama se centra en una adolescente de 16 años que se cuestiona el por qué su novio (no judío) no puede acompañarlos en el éxodo