Implementan verificación al transporte público
Para garantizar una mayor seguridad a usuarios del transporte público concesionado, mejorar las condiciones de operación y calidad en el servicio, el Gobierno de la Ciudad de México implementa procesos de verificación en las unidades de pasajeros de ruta fija, en modalidad convencional y corredores, que operan en la capital del país.
La Jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum Pardo, afirmó que el transporte concesionado cumple un papel fundamental en la capital del país, por ello, debe contar con las condiciones óptimas de seguridad para su servicio, ya que alrededor del 75 por ciento de los viajes que se realizan en la Zona Metropolitana del Valle de México son a través de microbuses y autobuses.
“El objetivo de este operativo, de este trabajo que se está haciendo es que los autobuses, los microbuses, estén en buen estado. Evidentemente, hay autobuses ya muy viejos; vamos a hacer un programa de sustitución, en el que estamos trabajando”, señaló.
En conferencia de prensa, Sheinbaum Pardo informó que en la pasada administración, existió una gran corrupción en distintos otorgamientos de permisos y verificaciones, lo que ha provocado que los autobuses y los microbuses que circulan en la Ciudad de México no cuenten con las condiciones óptimas para su operación.
“Estamos ya en revisión de todo el transporte concesionado de la ciudad, y no va a haber corrupción, pero tampoco vamos a ser permisivos en aquellos que no estén cumpliendo. Si no tiene licencia el chofer, si está roto el parabrisas, como bien dice el reglamento son dos semanas de suspensión si no cumple, entonces es corralón”, dijo.
El secretario de Movilidad de la Ciudad de México (SEMOVI), Andrés Lajous Loaeza, destacó que la meta planteada es implementar los verificativos sobre la totalidad del transporte público concesionado en la capital del país. Además, dijo, que las verificaciones iniciaron desde el 22 de enero en las rutas que han estado involucradas en más incidentes de tránsito, con previo aviso a los líderes y representantes de las rutas del servicio de transporte.
Notificó que en dos días se llevaron a cabo 280 entrevistas a operadores con 91 aplicaciones de alcoholímetro, ninguno resultó positivo. Destacó que ayer, en los Centros de Transferencia Modal (CETRAM) de Universidad y Taxqueña, se revisaron 213 unidades y se efectuó la misma cantidad de cuestionarios, 23 unidades fueron remitidas a depósito vehicular y 33 se encuentran suspendidas.
“Aquellas que fueron remitidas a corralón, quiere decir que las fallas que se detectaron afectan la operación del vehículo. Las que están suspendidas tienen 20 días para subsanar esas fallas y volver a circulación”, explicó Lajous Loaeza.
Señaló que en el proceso participan más de 50 servidores públicos de la SEMOVI, de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) y del Instituto de Verificación Administrativa (INVEA), de la Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México, así como representantes de ruta, para constatar el estado de salud de los operadores, documentación en regla y que las unidades cumplan con las condiciones físicas elementales para operar con seguridad.
Lajous Loaeza detalló que el calendario para la verificación fue establecido por la SEMOVI, de acuerdo a los incidentes viales reportados SSC entre el 2015 y 2018, en los que existió algún lesionado o estuvo involucrado el transporte público concesionado.
Luego del análisis, informó que los primeros verificativos se implementarán en las siguientes rutas: 1, 18, 14, 11, 2, 37, 36, 26, 25, 44, 10, 15, 28, 12, 108, por lo que a todas se les notificará mediante un calendario público las fechas para su proceso de verificación.
Para llevar a cabo el proceso se realiza un cuestionario electrónico acompañado de evidencia fotográfica, se revisa la licencia vigente, placas, tarjeta de circulación, póliza de seguro, llantas, cromática completa de la unidad y ruta, así como puertas, ventanas y parabrisas en buen estado. En caso de incumplimiento, se procede con la sanción correspondiente.
Lo anterior, comentó, es una primera fase que se implementa en todas las unidades de las 15 rutas en un horario que no afecte a los usuarios y para ello, se utiliza una aplicación en celulares, que facilita levantamiento y ayuda a crear una base de datos confiable para la SEMOVI.