Apoyo al Gran Telescopio Milimétrico
Si hubiera necesidad de construir ahora otro telescopio milimétrico en cualquier lugar de México, lo podríamos hacer y con mayor independencia del extranjero, la dependencia va siendo menor y se torna en colaboración, dijo Leopoldo Altamirano.
El pasado 10 de abril, la ciencia hizo historia con la presentación de la primera imagen de un agujero negro, un proyecto que requirió la colaboración de 8 telescopios en Estados Unidos, España, Chile, Antártida y México, que participó con su Gran Telescopio Milimétrico (GTM) “Alfonso Serrano” y con lo cual se demostró que en México se hace ciencia fundamental y se desarrolla tecnología a nivel mundial.
Sin embargo, la participación del radiotelescopio mexicano fue también posible gracias a la acción coordinada de diversas instituciones y actores. Entre ellos, destaca la del Foro Consultivo Científico y Tecnológico (FCCyT), cuyo titular en el periodo 2008-2012, doctor Juan Pedro Laclette, coordinó el cabildeo del Grupo de los 11 o Grupo Vincula, que conjuntó a los principales representantes de los sectores académico, gubernamental y empresarial entre 2009 y 2012 para gestionar ante la Cámara de Diputados los recursos necesarios para la conclusión del telescopio, que en aquel entonces alcanzaba un grado de avance de 75 por ciento.
Otros actores también contribuyeron al proceso de creación del GTM; en su publicación Ciencia e innovación en México; cuatro grandes proyectos científicos, de 2012; se lee que el doctor Juan Carlos Jáuregui Correa, entonces director adjunto de Operaciones del Centro de Tecnología Avanzada (CIATEQ), institución que colaboró en diferentes etapas del GTM, desde la licitación y supervisión de ingeniería hasta la inspección de la calidad de las soldaduras y mecanismos para el funcionamiento en general, dijo que “el presupuesto es operado en partidas anuales y las prioridades cambian año con año, por lo tanto, constantemente había que justificar y reinventar el proyecto ante los funcionarios para que la Federación destinara los recursos. Pareciera que las finanzas obedecen a la ley de la física cuántica, el dinero fluye por paquetes, no de continuo”.
En entrevista por separado para el Foro Consultivo, el doctor Leopoldo Altamirano Robles, director del Instituto Nacional de Astrofísica, Óptica y Electrónica (INAOE), comentó que en el contexto actual de política científico del país se debe de conceder la misma importancia a la ciencia básica y la ciencia aplicada. “No se puede desarrollar algo nuevo si no tienes un conocimiento teórico extenso y fundamental que te permita avanzar”.
“Si hubiera que construir un telescopio milimétrico en otro lugar de México lo podemos hacer, sin que le pidamos permiso ni conocimientos a alguien del extranjero (…) la dependencia va siendo cada vez menor y se vuelve cooperación”, comentó.
Aunque el doctor Altamirano no se mostró preocupado por perder financiamiento de forma inmediata para los diversos proyectos en los que trabaja el GTM, sí extendió la recomendación para pensar la ciencia a largo plazo. “Hay que hacer un planteamiento que vaya mucho más allá de las administraciones de 6 años, 10, 15, 20 años. (…) Cuando hagamos eso podremos garantizar que se llegue al objetivo”.
El GTM cuenta con una antena de 50 metros de diámetro que permite observar ondas milimétricas de entre 0.85 y 4 milímetros, captar las radiaciones generadas por el nacimiento de estrellas, galaxias y planetas formados hace más de 13 mil millones de años, cuando se originó el universo, así como la luz de otras estrellas cercanas, explica Abigail Mendoza en el libro Ciencia e innovación en México.
Más aún, aunque el GTM es un instrumento astronómico sin precedentes en el país, su importancia no solo recae en la generación de conocimiento estelar sino en el apoyo al desarrollo científico y tecnológico de la nación. De hecho, originalmente se contemplaba que solamente 15 por ciento fuera hecho por empresas mexicanas y al final más del 85 por ciento fue ejecutado por compañías del país; esto ayudó a conservar la inversión en el país generando empleos para las comunidades y potencializando a las empresas que se volvieron más competitivas.