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Estado Mexicano enfrenta deudas con 40 millones de niñas, niños adolescentes


La crisis de derechos humanos y violencia armada generalizada continúa cobrando vidas infantiles, diariamente desaparecen cuatro niñas, niños o adolescentes y asesinan a 3.6, en total impunidad.

A 30 años, que los líderes mundiales aprobaron la Convención sobre los Derechos del Niño (CDN) aún quedan muchos desafíos por superar: desigualdades económicas, Discriminaciones, violencias e invisibilidad.

La Convención se ha convertido en el acuerdo de Derechos Humanos con más adhesiones de la historia, contribuyendo al reconocimiento de la difícil condición de millones de niñas y niños en todo el mundo. Su ratificación casi universal se debe al hecho que la Conversación logró un consenso desde las diferentes realidades culturales, sociales, económicas y políticas.

En 1990 el Senado de la República Mexicana ratificó la Convención sobre los Derechos del Niño, la cual tiene el mismo rango jurídico que la Constitución Política; y de la cual derivan obligaciones para el Estado, cómo legislar en materia de derechos de la infancia y adecuar sus normas internas a las disposiciones de la Convención.

En 2011 las organizaciones sociales y legisladoras comprometidas logramos incorporar el principio del “Interés Superior de la Niñez” en el artículo cuarto constitucional. Este principio deberá guiar el diseño, ejecución, seguimiento y evaluación de las políticas públicas dirigidas a la niñez.

Para el año 2014 logramos el diseño y aprobación de la Ley Genera de Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes; y en 2015 la creación del SIPINNA como mecanismo de coordinación de políticas públicas.

La Convención y la Ley General representan una oportunidad invaluable para cambiar la visión asistencialista, incidir en las prácticas sociales que aún consideran a niñas, niños y adolescentes como propiedad privada de las familias, y construir una sociedad que toma en cuenta su opinión en todos los asuntos que les afecta.

México continúa rezagado sin avances significativos en el cambio cultural que supere la invisibilidad de niñas y niños, y dejar de verlos sólo a través de su grupo familiar. Es decir, no se ha logrado reconocer su “equivalencia humana” frente a las personas adultas, por lo que continúan recibiendo un trato desigual.

Aún cuando habitan el país 39.8 millones de niñas, niños y adolescentes de 0 a 17 años, que en términos relativos equivale una tercera parte de la población; es decir, 1 de cada 3 habitantes en México son niñas, niños o adolescentes. Ellos y Ellas no reciben un trato igualitario. La inversión en la infancia no supera 8 puntos del Producto Interno Bruto (PIB). El Estado Mexicano ha ignorado las distintas recomendaciones internacionales para enfrentar la crisis institucional de derechos humanos que se vive en todo el territorio nacional, donde diariamente desaparecen 4 y asesinan a 3.6, en total impunidad.

La creciente militarización de la seguridad pública ha derivado en cerca de 21 mil niñas, niños y jóvenes víctimas de homicidio doloso desde el año 2000; y más de 7 mil casos de niñez desaparecida. Con el cambio hacia una política de persecución a la niñez migrante y sus familias se ha incrementado las detenciones arbitrarias, deportaciones masivas, estímulo de la xenofobia y mayor violencia del crimen organizado con la tolerancia de las autoridades mexicanas.

El nuevo gobierno federal sigue negando la crisis de derechos humanos y el impacto negativo de la violencia generalizada en contra de niñas niños y adolescentes; adquieren un nivel de indolencia política ignorar el importante papel que tiene el Sistema Nacional de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes (SIPINNA) para la coordinación de las autoridades; un triste ejemplo negativo lo mantiene el Presidente de la República, quién no ha asistido a las sesiones ordinarias, negando su responsabilidad legal y enviando una señal negativa de desprecio a la niñez mexicana, y realizando nuevamente más recortes presupuestales a los programas y políticas públicas de infancia y adolescentes. #REDIM Red por los derechos de la infancia en México y las 77 organizaciones sociales que la integran ratifican su compromiso con la promoción y defensa de los derechos humanos de niñas niños y adolescentes en México, quienes desde nuestro rol de contraloría ciudadana continuaremos exigiendo el cumplimiento de las obligaciones legales qué significa la Convención sobre los Derechos del Niño de la ONU

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