top of page

VOX POPULI


EL PODER DE LA SONRISA INTERIOR ES UN EJERCICIO SORPRENDENTE


Este ejercicio está magistralmente enseñado en el libro “Transformar el estrés en vitalidad” por Mantak Chía y puede modificar cualquier energía estresante que nos rodee el cuerpo o nos haga infeliz el alma.

Todo lo que hay que hacer es buscar un lugar tranquilo, sentarse o recostarse, cerrar los ojos, sonreír y dirigir la atención hacia cualquier parte de nuestro cuerpo que esté expresando dolor o sufrimiento interior.

Puede sonreírle a su cabeza durante dos minutos y observar cómo comienza a relajarse, puede sonreírle a su recuerdo más doloroso y ver con su visión interior cómo su recuerdo doloroso va desvaneciéndose poco a poco; puede sonreírle a su sensación de fatiga o de cansancio y comenzar a notar los cambios que se producen en su respiración y en el estado de su cuerpo.

También puede comenzar a sonreír a todas las cosas que tiene en frente e ir descubriendo que su conciencia se va volviendo una conciencia más sana y más feliz.

Ahora vamos a la explicación de lo que ocurre realmente cuando aplicamos la sonrisa interior a cualquier cosa que estemos mirando u oyendo: Los ojos y la boca se convierten en una especie de emisores de energía amorosa y curativa que puede disolver la falta de atención, de conciencia y de comunicación con nuestros órganos corporales y producir una sensación de paz, de alivio y de mejor funcionamiento corporal.

Partiendo del hecho de que nuestras células y órganos son seres vivientes, podemos ensayar a sonreír con cierta regularidad a algunos de nuestros órganos o partes corporales que estén necesitando aflojar su tensión o su estrés y comprobar el poder que tiene nuestra sonrisa interior; vamos a algunos ejercicios y en futuros artículos volveré a tocar estos temas tan interesantes: sentado con los ojos cerrados, después de hacer dos respiraciones profundas y las manos unidas o entrelazadas sonreír a los propios ojos durante un minuto aproximadamente; ahora vamos a llevar nuestra atención a nuestro hígado que está situado en el lado derecho de nuestra cintura, igualmente uno o dos minutos; ahora vamos a sonreír a nuestra vesícula biliar situada más o menos a una pulgada por debajo de nuestra costilla derecha; ahora vamos a sonreír a nuestra columna vertebral comenzando desde lo más bajo hasta llegar a la base del cráneo, tiempo de trabajo cuatro o cinco minutos.

Debe repetir estos ejercicios tres veces al día hasta que los aprenda de memoria y hasta que obtenga una sonrisa natural y permanente y entonces podrá probar y comprobar que la sonrisa interior nos produce paz interna, relajación, una mayor conciencia y una tendencia mayor hacia la buena salud.

DIRECTORIO

Lic. Fernando González Parra

Director General

Mtra. Graciela Ornelas Prado

Directora

Edmundo Olivares Alcalá

Subdirector

Karen García Hernández

Jefa de Redacción

Héctor Manuel Serna Ornelas.

Juridico

Pablo Gómez

Articulista 

Ernesto Olmos Avalos.

Alitzel Herrada Herrera.

Garnica Muñoz José Antonio.

Reporteros

Adonay Samoya H.

Lic. Andrés Aguilera.

Roberto Chavez.

Renato Corona Chavez.

Javier Méndez Camacho.

Gustavo Santos Zúñiga.

Blas. A Buendía

Lic. Alicia Barrera Martínez

Columnistas

  • Icono social Twitter
  • Wix Facebook page
bottom of page