La “muerte” electoral anunciada contra Peje y su Partido Morena

Al unísono de “¡fuera López!”, demanda pronunciada por quienes participaron en la marcha pacífica de FRENA, la casa encuestadora Parametría reveló la irremediable “muerte electoral” en contra del Peje, que en su calidad de Presidente de México, el grado de aceptación del pueblo mexicano agraviado por tantos errores de sus gobernantes, ponen en peligro la mayoría de Morena en la Cámara de Diputados.

En la convulsión social que también se escucharon frases encontradas como “es un honor estar con Obrador”, se notó la presencia de agitadores profesionales, aunque para Parametría, con extraordinaria objetividad, presentó en su más reciente estudio del mes de septiembre/2020, un caótico panorama para el partido del Peje.

“¡Somos FRENA, un movimiento pacífico”, reiteraban los manifestantes inconformes a través de megáfonos, por lo que de forma paralela, Parametría consideró que este tipo de movilizaciones se enmarcan por las actitudes mediáticas del presidente y sus venganzas políticas en contra de sus adversarios, particularmente las denostaciones que han degenerado su relación con el Cuarto Poder. “López Obrador no va a someter al Cuarto Poder”, se escuchó entre la multitud.

Lamentablemente, el Peje Lagarto se ha enfrascado en un duelo entre lo que es la frontera de la fuerza política como Estado, contra el razonamiento de las ideas que se suscriben, día a día, con la ayuda paradójica de la mansedumbre de seudo periodistas versus quienes ejercen esta noble profesión con alta investidura intelectual.

Ese “estire y afloje” es detectable en las páginas de los periódicos Reforma y El Universal –éste último fiel testigo de la historia política de la Nación-, en tanto que el rotativo de Alejandro Junco, explota su talento comercial con un doble sentido social: luchan denodadamente por mantener el estatus constitucional en la defensa de la libertad de expresión, consagrada en los artículos sexto y séptimo de la Carta Magna, pero a la vez, de forma secreta, demandan los dotes de publicidad del Estado.

En la época del presidente José López Portillo (otro López), ahorcó a los medios de comunicación “cerrándoles la llave” referente al suministro económico por la publicidad que ya no les fue aprobada. “No te pago para que me pegues” o “Te pago para que me pegues”, frases atribuidas a López Portillo, que sin embargo, la locución es usada para ejemplificar el uso de la publicidad oficial en México como método de coerción y censura a los medios de comunicación mexicanos.

Mejor dicho, enunciados célebres que recobra sentido cada vez que un nuevo gobierno se enfrenta a una prensa que busca el simbiótico control del Estado con base a las prebendas que podría autorizarles el poder presidencial, lo que denota que López, ha carecido de un operador político profesional, para concretar entendimientos con la prensa en general.

El tabasqueño, se niega a entrar al aro y menos dejar que le tuerzan el brazo los antiguos socios de la Mafia del Poder neoliberal, aunque su gobierno esté despilfarrando el erario pública de forma descaradamente irresponsable.

Parametría no pierde de vista que poco a poco, el “pueblo sabio” va despertando del embelesamiento hacia el gobierno del Presidente Obrador, el cual llegó a tener una cifra histórica de aprobación del 86% -no vista por ninguno de los presidentes que lo antecedieron-, pero cayendo al 54% en marzo, es decir, un desplome de 32 puntos en apenas 16 meses de gobierno, representando todo un récord totalmente negativo.

Milagrosa pero contraproducentemente, le “cayó como anillo al dedo” la pandemia que le permitió recuperarse y subir al 65 por ciento en agosto, pese a las disconformidades que se han suscitado, sobre todo en el mes patrio de septiembre, cuando su imagen ha ido decayendo luego de calificar al diario Reforma como un “pasquín inmundo”, graso error del Ciudadano Presidente.

Si bien López Obrador ha anunciado en reiteradas ocasiones que el 1 de diciembre/2020, renunciará a la Presidencia de la República, en el argot periodístico hay una oración políticamente abstracta: “¿Cómo se matan las moscas?”, y la pronta respuesta: “¡A periodicazos!”

Esa sería la “buena” o “insana costumbre” de los jefes editorialistas que desde el más prestigiado diario o pasquín, se dedican a capitalizar la criticar contra los políticos que se apartan del estado de Derecho. Es una doble tarea, una doble cara, que a final de cuentas, se trata de una extorsión y un chantaje maquinado.

No obstante de ello, es recurrente la faena corrupta entre lo que es, también, un gobierno que hace mal sus acciones que impactan en la sociedad y atenta contra la libertad de expresión, siendo los periodistas auténticos censores, protegidos por la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.

Ese estudio de mercadotecnia en relación a la credibilidad del actual Jefe del Ejecutivo, si bien se toman en cuenta las cifras de tan sólo de Parametría, es para darle consistencia al análisis sociopolítico del momento.

Si se toma el promedio de encuestas que hace Oráculos (el Poll of Polls), la aprobación del presidente máxima fue de 81 puntos en febrero de 2019, para caer a 58 puntos en marzo de 2020 (una caída de 23 puntos), recuperarse a 60 puntos en abril y luego volver a caer a 58 puntos actualmente, impactándole por la muerte de tantos mexicanos por el Covid-19, lo que degeneró en el calificativo de “genocida”.

Es ese perverso juego de porcentajes “del sube y baja”, se deja entrever que el propio Peje, con sentido maquiavélico, conoce los momentos para fijar la Agenda Nacional que muchas veces genera inconformidades entre todos los actores de la sociedad.

Lo grave, lo dramático, es que si el presidente mantiene esa tendencia para el próximo año, similar a la que tuvo Peña, bajará de los 50 puntos en febrero, lo que significa que “¡habrá más gente que lo odie, a que lo ame!”, poniendo en riesgo que Morena pueda perder su mayoría en la Cámara de Diputados, repercutiéndole nocivamente en las elecciones legislativas del 6 de junio de 2021.

Los movimientos sociales son otros fenómenos que se incluyen como es el linchamiento ideológico y hasta físico que el gobierno del Peje Lagarto ha generado en contra de la fuerza social denominada FRENA, la cual ha ido creciendo cuán bola de nieve, pese a que a su paso encuentra a los testaferros del Estado. En este tenor, FRENA sigue escalando en tendencias a nivel mundial, lo que significa una excelente oportunidad para que el mundo sepa de las barbaridades del gobierno de López Obrador, en aras de #OcupaZocalo/19Sep y #LopezSeVa.

Al presidente López no le ha caído nada bien las movilizaciones de FRENA. Desde el ostracismo de Palacio Nacional, coloquialmente activa “lo que diga mi dedito” que es la represión en contra de toda tendencia nacional, manifestándose el hartazgo en contra del Peje Lagarto por el mal manejo de la pandemia Covid-19, enviando al cementerio a más de 350 mil personas.

Para colmo de males, el periódico Reforma en respuesta a que el presidente lo tacho como “pasquín inmundo”, ordenó a su equipo de caricaturistas construyeran un cartón tan hiriente que prácticamente incomodó al presidente. Si fueran otras épocas donde los códigos de ética se respetaban, Andrés Manuel López Obrador ya no sería Presidente de la República.

En su mañanera del viernes pasado, López Obrador externó una rabieta de carcajadas cuando le refirieron el tema de las masacres que se han venido dando en diversas regiones del país, sumadas las bajas por la pandemia del Coronavirus.

El diario Reforma pinta a un López Obrador -viejo de por sí-, sentado en una montaña de cráneos, riendo a carcajadas, mostrándose “una nube de diálogo”, con la frase: “¡Ahí están las masacres! ¡Ja-ja-ja-ja-ja-ja-ja…!”

“¡Fuera el dictador!”. El movimiento pacífico de FRENA ha ido creciendo tanto, que ya comenzó a preocupar al presidente, a quien le exigen que renuncie al cargo porque se ha convertido en un asesino serial, en un nato genocida. Un cibernauta anexó una leyenda a la caricatura de Reforma, al revivir el pasado del mal: “La reencarnación / el Hitler genocida siglo XXI”

Las redes sociales han figurado como apoyo políticamente intelectual, porque su sentido crítico es extraordinario: “Andrés Manuel López Obrador. Cobarde inmundo. AMLO reprime, censura y ataca desesperadamente a todos aquellos que señalan y denuncian su descarada corrupción, evidentes fracasos y total incompetencia. Los verdaderos enemigos del KK’s, son su propia ignorancia, ineptitud y soberbia, que lo inhabilitan para poder enfrentar la realidad del país”.

Entorno de todos estos movimientos de inconformidad, demandando “¡fuera el dictador!”, se observó que las fuerzas públicas tienen la consigna de “apagar” esos extraordinarios escarceos sociales que se han dado por sí solos, toda vez que el líder y fundador de FRENA, Gilberto Lozano, no repliega su hiperactividad, que a lo largo de su lucha, viene arengando insolentes llamados desesperados, que pese a ello, ha roto las cadenas del silencio y de la cobardía pese a la apatía de muchos ciudadanos se muestran desinteresados.

Ante la presencia de observadores internacionales de la ONU, los de FRENA condenaron la dictadura castrista-chavista-pejista, y enfatizaron que FRENA no parará sus acciones porque “esto es por nuestros hijos, y no vamos a parar”, “¡Ni un paso atrás!”, sentenciaron, al tiempo que su plantón con tiendas de campaña, perdurará “porque este es el inicio de la caída de López”.

Se quejaron que en todo momento, México vive una represión promovida por el propio Estado, pisoteando el espíritu rector de la Carta Magna. Convocó a desplegar un kilómetro con 500 tiendas de campaña de entre avenida Reforma, sobre Avenida Juárez al Palacio de Bellas Artes, hasta en tanto que el presidente ordene que abra el libre acceso de tránsito para llegar al Zócalo, y entregarle sus demandas que se estipulan en el artículo octavo constitucional, el cual dice a la letra:

Artículo 8º. Los funcionarios y empleados públicos respetarán el ejercicio del derecho de petición, siempre que ésta se formule por escrito, de manera pacífica y respetuosa; pero en materia política sólo podrán hacer uso de ese derecho los ciudadanos de la República. A toda petición deberá recaer un acuerdo escrito de la autoridad a quie

se haya dirigido, la cual tiene obligación de hacerlo conocer en breve término al peticionario.

2006 y 2020, guerra de tiendas de campaña. La multitudinaria unidad ciudadana se volcó porque, a pesar de hallarse en una encrucijada, emularon las propias acciones cuando López Obrador afectó el comercio de la ciudad con su grotesco plantón montado en 2006, tras una contienda electoral polémica, llamando a sus huestes a bloquear el primer cuadro de la capital mexicana.

Las pérdidas económicas de aquel entonces para los servidores turísticos y productivos mexicanos, fueron multimillonarias; desde entonces, López trazó su línea de despilfarro del Erario Público Federal que hasta ahora la Auditoría Superior de la Federación ha dejado en el olvido realizar inspecciones necesarias a este “nuevo gobierno”.

Catorce años después, la sociedad organizada comenzó a oprimir al gobierno federal, alistándose en el movimiento Anti AMLO pacífico, exigiendo a López y su 4T (Cuarta Transformación), renuncie como Presidente de México, debido a las múltiples acusaciones que obrador en su contra, como la afectación del núcleo social y familiar de millones de mexicanos. El desempleo es monstruoso y la inseguridad, caótica.

En calles y avenidas de la Ciudad de México, un valiente ciudadano, con vestimenta humilde y de sombrero de palma, tuvo la osadía de exhibir una cartulina para expresar su rencor: “¡AMLO vete ya! ¡Espurio! ¡Traidor! ¡Corrupto! ¡Narco-presidente dictador! ¡Diabólico! ¡Destructor! ¡Tú ineptitud es un delito! ¡Andrés es todo un caso clínico!”, así como se escucharon cánticos religiosos de “La Guadalupana”.

En la marcha del sábado 19 de septiembre –fecha en que paralelamente se conmemoraron dos aniversarios de los terremotos que azotado a México: el 35 de 1985; y el tercero de 2017-, en medio de una tarde fría, fue obstaculizada por la presencia de granaderos, pero los manifestantes de FRENA contrarrestaron la presencia intimidatoria al entonar el Himno Nacional Mexicano, no sin antes condenar, insistentemente, la disolución presencial de los trabajadores de la jefa de gobierno Claudia Sheinbaum “que se visten de policías”.

Ante la ola invasora de inmigrantes, los de FRENA alertaron también la presencia de infiltrados centroamericanos que se mezclaron entre verdaderos mexicanos en los momentos de ocupación hacia el Zócalo, lo que originó un malestar nacional por lo aberrante de esta acción azuzada desde el escritorio ejecutivo del gobierno de la ciudad, y en cuyo ataque policiaco, varios jóvenes fueron golpeados, uno de ellos, arrastrado como guiñapo por guardianes públicos en un espacio de 30 metros. Algunas tiendas de campaña fueron decomisadas por la fuerza pública.

Los provocadores del Estado también estuvieron presentes, independientemente de la presencia de la policía pública, pero ante el llamado de no responder a la violencia de los granaderos, no surgieron mayores incidentes pese a que muchas mujeres estuvieron iban acompañadas por sus pequeños hijos.

“López está haciendo el ridículo mundial y se ha convertido en un atentico represor”, apuntó Gilberto Lozano, a quien el gobierno de corte castrista-chavista-comunista, lo han satanizado, calificándolo como “un guerrillero hablantín”.

El líder de FRENA convocó a la comunidad nacional e internacional para dar a conocer al mundo, sobre los acontecimientos que están ocurriendo en México en estos momentos, a través de las redes sociales de Twitter, Facebook, YouTube, Instagram y los diarios más importantes de México, Estados Unidos y de Europa.