A obreros de ICA Fluor se les aplicó la “ley garrote”

El Juez empieza en su propia casa y el Gobierno Federal, aplica la “Ley del garrote”, a los obreros de ICA en Tabasco. “Balazos y no abrazos” fue lo que utilizó el gobierno en la refinería de dos bocas

Es condenable y reprobable que se trate mal a los trabajadores, que a ellos sí les apliquen los “balazos y no los abrazos”, cuando están luchando para mejorar sus condiciones laborales y salariales, indicó el senador del PRD, Juan Manuel Fócil Pérez, en referencia a los hechos registrados en la Refinería de Dos Bocas.

“Hay tres detenidos y la verdad es que no se vale que los metan presos por estar reclamando sus derechos, es una violación a los derechos humanos y deja muy mal parado al gobierno el uso del garrote, el uso de la policía, el uso de gases lacrimógenos para reprimir a los obreros”, expresó.

La semana pasada obreros que laboran en la construcción de la Refinería Dos Bocas, en Paraíso, Tabasco iniciaron un paro de labores para exigir mejoras salariales y laborales. La protesta derivó en un enfrentamiento con elementos de la Policía del Estado de Tabasco, dejando como saldo al menos tres heridos.

En videoconferencia de prensa desde Tabasco, Juan Manuel Fócil Pérez, señaló que sobre este caso el Gobierno Federal se justificó y lavó las manos diciendo que fue un conflicto entre sindicatos, algo que es incorrecto.

“Más de 100 mil muertos en lo que va del sexenio, más que en otros sexenios, y lo único que dice el gobierno ‘es entre delincuentes’, nada más tenemos al Gobierno Federal como narrador, de todo lo malo le echa la culpa a los sindicatos, a los delincuentes, que es bronca entre ellos y no se mete, pero nuestro país está padeciendo los problemas, así que debe haber una responsabilidad más seria por parte del gobierno”, enfatizó.

El senador del PRD agregó que no es la primera ocasión que se aplica la “ley garrote” en contra de los ciudadanos. “Igual trataron a campesinos, ejidatarios, estudiantes, amas de casa, cuando aquí en Tabasco se han quejado por un mal servicio público, la ‘ley garrote’ en su máxima expresión”, concluyó.