CHISPAS…

……..Adonay SOMOZA HERNÁNDEZ………. MARÍA DE LAS MERCEDES CARREÑO NAVA. LA CHOCA. (Conocida en el medio cinematográfico como Meche Carreño) nació en Minatitlán, Veracruz, el 15 de septiembre de 1947. Sus padres fueron: don Daniel Carreño (llamado por sus compañeros de trabajo Carreñito, expresaba en ocasiones un pesar con los mismos debido a los "desfiguros" que su hija hacía al aparecer con poca o nula ropa en las películas donde actuó; sentir comprensible debido a los cánones morales de la época. F: Diario Minatitlán), y doña Malaquías Nava. Cuando tenías 2 años su madre y ella se trasladó a la Cd. de México para radicar allí permanente. Estudió arte dramático en el Instituto Andrés Soler. Mientras estudiaba participó en diferentes obras teatrales y realizó pequeñas giras con ellas.

Meche Carreño, trabajó como bailarina en diversos centros nocturnos, fue actriz y productora de cine mexicana. En su adolescencia estudió arte dramático en la academia Andrés Soler de la ANDA.

Participó en diversas obras teatrales experimentales, en una de las cuales colabora con Alejandro Jodorowsky, durante esa época complementa su actividad teatral con el modelaje y gracias a esa actividad la empiezan a conocer masivamente como “La chica del monokini”, al modelar una de estas prendas. Actividad que le abre las puertas y debuta profesionalmente con Carlos Ancira en la obra El hombre y su Máscara.

A finales de la década de los 60 debuta en el cine con pequeños papeles. Se casa con el fotógrafo y empresario José Lorenzo Zakani y este se propone lanzarla al estrellato cinematográfico, incluyéndola en la productora Uranio Films, con la que inicia Damiana y los hombres (1967), basada en un argumento escrito por Meche Carreño y dirigida por Julio Bracho; allí Meche se muestra en toda su plenitud convirtiéndose de pronto en un símbolo sexual. Bracho la dirigiría nuevamente en Andante (1969), filmada en diversas locaciones en Europa; pero que sin embargo fue un fracaso comercial. Después del éxito de Damiana y los hombres, Meche necesitaba reafirmar que este no era efímero, lo que demostró de la mano del director Rogelio A. González con quien filma La sangre enemiga (1971) y La inocente (1972)

En 1973 el director Emilio Fernández la elige para su historia La choca, que inicia con imágenes de Meche en un río, bañándose totalmente desnuda, que la convierte en uno de sus mayores logros, cuando por su personaje en la cinta recibe el Ariel por coactuación femenina. Inmediatamente después filma otros proyectos exitosos que también explotaban su atractivo sexual, como La otra virginidad (1975), dirigida por Juan Manuel Torres, quien se convierte en su segundo esposo ese mismo año; y nuevamente con Emilio Fernández en Zona roja (1976); donde sostuvo un auténtico duelo con quien sin duda era otro de los mayores símbolos sexuales de la época: Fanny Cano. Finalizando los años 70, y después del duro golpe que le supuso el fallecimiento de Juan Manuel Torres en un accidente automovilístico se va a radicar por un tiempo a París y posteriormente a los Estados Unidos; únicamente retornaba para actuar esporádicamente.

En 1974 incursionó en la televisión de la mano del productor, de origen chileno, Valentín Pimstein, protagonizando la telenovela Siempre habrá un mañana. En 2009 fue homenajeada en San Miguel de Allende, Guanajuato, durante el Festival Internacional de cine Expresión en corto; donde se le otorgó la Cruz de Plata. En sus últimos años se dedicó al activismo ambiental y planeaba escribir un libro para niños.

Galardones que obtuvo en su trayectoria artística: Ariel. Año 1974. Categoría, Coactuación femenina. Película Los perros de Dios. Nominada en 1975, por La Choca. Obteniendo el triunfo total. Mercedes Carreño “La choca”, falleció el 22 de julio de 2022 a los 74 años de edad, debido a complicaciones relacionadas con el cáncer de hígado que la actriz padecía, tras estar hospitalizada durante 3 días en Estados Unidos, F: Fundación Wiki medía, Inc…

DE MI COSECHA. Conocí a meche Carreño en los Estudios Churubusco Azteca, cuando la película La Choca, se encontraba en boga, siempre sonriente comentaba su participación en la cinta mencionada; Meche aguardaba el arribo de Oscar Saro, (nombre artístico), galán de complexión fornida que había participado en varias películas acompañando a los grandes de aquellas épocas; compañeros periodistas y diversos técnicos, comentaba que ambos se encontraban de romance, ella ante los cuestionamientos de los reporteros respondía que eran especulaciones de la prensa; transcurrió media hora aproximadamente cuando el galán, aún no popularizado en las pantallas, entro por el acceso a los estudios saludó formalmente a Meche y ambos desaparecieron a bordo de un automóvil; en mis cotidianas visitas los Churubusco, la localizaba en el restaurante o por los pasillos con distintos personajes de la cinematografía.

Una versión que circuló en la citada productora de cine fue, que Meche Carreño auxiliaba a Doña, Malaquías, quien vendía tamales en la cercanías del Cine Florida, de la Colonia del Carmen, centro, del ex Distrito Federal (su madre, a la que conocí vía telefónica, cuando intentaba localizar a la ya notorio actriz, “Mala” me respondía que se encontraba muy ocupada preparando su próximo filme.

Gustavo Suárez Ojeda, empleado de la línea aérea Mexicana de Aviación, laboraba en el departamento de Contabilidad y concluyendo su horario, el tiempo libre lo dedicaba a reportear para Cine Mundial, diario especializado en los acontecimientos de la pantalla grande; sus propietarios (siempre lo negaron), fueron; Mario Moreno “Cantinflas” (Fundador), posteriormente Mario Alvírez y Javier Solana; Gustavo me presentó a Mario Marzano Luna y José Luis Mujica, ambos fallecidos, fue Marzano quien fotografió a Meche Carreño en el Balneario público “Bahía”, con el famoso Monokini, luciendo sus pechos sostenidos con unos tirantes; esa imagen se publicó en el periódico aludido, en los años 60’s, sin precisar, por órdenes del director Don. Octavio Alba, de origen hispano; pero a quien le surja, muy justificada, duda, aquellos ejemplares pueden ser consultados en la Hemeroteca de la Ciudad Universitaria.

De José Lorenzo Zakani, se comentaba que era propietario de una fábrica de mosaico, otra versión afirmaba que era fotógrafo y productor de películas y pertenecía al exclusivo Club Fotográfico de México; y se enamoró perdidamente de Meche, con la que contrajo matrimonio, de cuya unión nació José Lorenza Zacani Carreño, siendo precisamente Meche, quien me lo presentó en Plaza Galería; algunos años más tarde, aquel apuesto galán viajó a Los Ángeles, California, en donde contrajo matrimonio; fue la primera y única ocasión que saludé a José Lorenza Zacani hijo. Lo real de esta historia consiste en que al contraer matrimonio con el cine fotógrafo y empresario José Lorenzo Zakany Almada, propietario de Uranio Films, productora de largo metrajes, la propuso para que Meche Carreño iniciara su trayectoria cinematográfica, siendo su primera aparición estelar en el rodaje de la cinta, Damiana y los hombres (1967), acompañada por Lucía Guilmain, también fallecida; continuaron sus intervenciones para la pantalla de cristal en, No hay cruces en el mar (1968) y las siguientes descritas en líneas anteriores. Mercedes Carreño. Descanse en paz…