Desde temprano, familias xochimilcas acudieron a panteones por el día de las madres.

Tras dos años de permanecer cerrados por la pandemia por COVID-19, este Día de las madres, los panteones de Xochimilco reabrieron sus puertas, y se escuchó música y las familias completas, con flores en las manos, acudieron a visitar las tumbas de las madres que han dejado este mundo.

En el panteón de Xilotepec, el más grande de la demarcación, se tuvo una afluencia constante desde las 9 de la mañana. En el corte preeliminar se maneja una afluencia de 20 mil personas.

El alcalde de Xochimilco, José Carlos Acosta Ruíz, informó que se reforzaron los rondines de vigilancia en todos los camposantos vecinales para seguridad de los visitantes.

A pesar de su edad, doña Rosa Rubí Sandoval, de 97 años de edad, acudió a visitar las tumbas de su mamá y suegra a quienes aún recuerda con cariño.

En compañía de su hija y nieta, comenta que: “la visita a los difuntos el 10 de mayo es una costumbre arraigada entre los xochimilcas que nunca se perderá”.

Por su parte, don Fernando Mendoza, nativo de La Huichapan, asegura que desde hace 17 años que falleció su mamá, cada 10 de mayo acude a llevarle flores y seguirá haciéndolo hasta la que la vida así se lo permita.