Desmienten que Rafael Guerra pudiera aceptar una embajada.

…BLAS A. BUENDÍA………………………..

El magistrado presidente Rafael Guerra Álvarez negó rotundamente estar interesado para incursionar en el mundo diplomático en caso de que pudiera ser promovido por el Ejecutivo federal, en el Servicio Exterior Mexicano.

Lo anterior surge en lo que han dado por llamarle “radio pasillo”, tanto en la sede del Tribunal Superior de Justicia local, como en la Cámara de Diputados y el Senado de la República, referente a su futura carrera política.

Una fuente confiable narró el trascendido de una charla informal que sostuvo con el magistrado presidente del Poder Judicial local, quien manifestó su amplia extrañeza por la “burbuja especulativa” por aceptar en lo sucesivo, un cargo diplomático, sobre todo por su consolidada relación con el Presidente de la República, licenciado Andrés Manuel López Obrador.

—“Yo no sé de dónde sacaron ese rumor”, dijo de forma aclaratoria.

¿Entonces permanecerá en el cargo?, se le consultó.

—"Claro que sí”, respondió.

El intercambio de ideas fue muy breve, según la fuente consultada.

Cabe destacar que las reformas a la Constitución de la Ciudad de México, y el fallo de la Suprema Corte de Justicia de la Nación para salvaguardar la autonomía del Poder Judicial, le valieron al magistrado Rafael Guerra Álvarez, reelegirse para un periodo de cuatro años el cual está cabalmente cumpliendo.

La posición política del magistrado Rafael Guerra, quien es también presidente de la CONATRIB (Comisión Nacional de Tribunales Superiores de Justicia de los Estados Unidos Mexicanos), no tiene parangón debido a su cercanía con el Presidente Andrés Manuel López Obrador, a quien en el 2001, fungió como su asesor legal para defenderlo del Juicio Político que le entabló el entonces presidente Vicente Fox, quien en un afán de revanchismo político, optó por recular a fin de no poner en riesgo la estabilidad social de toda la nación, ya que su decisión era draconiana.

Si bien es cierto que no dejará de ser interpretativo, pero no especulativo, el extraordinario valor que el magistrado Guerra se haya tomado una selfiel con el Ejecutivo federal en Palacio Nacional, en noviembre pasado, el suceso posee un trasfondo político benéfico para su futura carrera tanto dentro del quehacer político-jurídico nacional, pero encaminado hacia una futura carrera en el Servicio Exterior Mexicano.