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El maldito narco sexenio


.BLAS A. BUENDÍA. …………………………………………

Llama mucho la atención que al final del camino tormentoso de este maldito sexenio que desdichadamente Andrés Manuel López Obrador ha creado una película de terror, el político tabasqueño todavía tiene el cinismo de presumir que sus amigos narcotraficantes “no solo son humanos” sino “personas respetuosas”, cuando de antemano la sociedad sabe que el narco jefe de la mafia de Palacio Nacional, los solapa arrogantemente, viendo el mundo al revés… (¡Sí, hahaha…!)

Y si bien es cierto que no hay día que defienda a esos grupos criminales, comentó que los cárteles de droga “respetan a la ciudadanía” y que en su mayoría “simplemente se matan entre sí” (¿¡¡¡…!!!?), como si fuera un simple juego de naipes, negándose a aceptar la realidad que debido a su beligerancia, le dio vida al quinto poder, de facto, al crimen organizado.

Pero tampoco tiene recato ni vergüenza alguna ya que el presidente Andrés Manuel López Obrador defendió nuevamente a los grupos criminales al afirmar que son “personas respetuosas”, que para la comunidad intelectual, azorada, no da crédito sobre las recurrentes y demenciales expresiones del Ejecutivo federal.

La prensa nacional, con repercusiones internacionales, relató que en la conferencia matutina del jueves 25 de abril, se le cuestionó sobre la injerencia del crimen organizado en el proceso electoral, a lo que el mandatario tabasqueño desestimó al asegurar que las autoridades “hacen su trabajo”, sin dar explicación alguna lo que deja entrever su amplia complicidad con el crimen organizado.

“Siempre que hay una elección se utiliza lo de la violencia o lo del miedo, siempre. Es más, aquí comenzaron con eso, comenzaron con lo del miedo, al grado que yo llegué a decir aquí, con ese propósito, de que no fueran a utilizarlo como estrategia porque, la verdad, la verdad, son muy perversos los conservadores; no generalizo, pero hay unos que son malos de Malolandia”, conjeturó sarcástico, para envolver su ideología de odio y villanía, que no tenía nada que ver con las elecciones de Ecuador y el asesinato del candidato presidencial, Fernando Villavicencio, ocurrido el 9 de agosto de 2023, siendo considerado como un magnicidio.

“Uno, este de Ecuador. El que está de presidente estaba en tercer lugar en las encuestas, estaba abajo, y había un candidato que estaba en segundo lugar y que tenía diferencias con quien estaba en primer lugar o con el grupo o el partido que estaba en el primer lugar”, apuntó.

“Resulta que el que estaba en segundo lugar, que hablaba vinculando a los que estaban en primer lugar con el narcotráfico o algo por el estilo, lo asesinan; una situación de lo más rara y oscura porque a los que detienen, creo que a siete, a cinco los asesinan, a los que habían participado. Ojalá y algún día tengamos toda la historia aquí para contarla”, dijo de forma incongruente, en momentos en que el Cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG) —asociado con el crimen organizado—, extraoficialmente se le acusó de haber utilizado a sicarios para asesinar a Villalobos.

Consultado referente al incidente que vivió la candidata presidencial de Morena, Claudia Sheinbaum, quien fue interceptada por un grupo de encapuchados en Chiapas, prácticamente le restó importancia.

No obstante de ello, la prensa mexicana lo cuestionó si el crimen organizado “se portaba bien” cuando él visita regiones como Badiraguato, Sinaloa, López Obrador respondió que las bandas criminales y los cárteles de droga son esencialmente “personas respetuosas”, que “respetan a la ciudadanía” y que en su mayoría “simplemente se matan entre sí” (¡Glup!)

“Hay algo que se debe de saber también: las agresiones que se dan en el país por lo general se dan entre los grupos (criminales); afortunadamente, aunque todas las agresiones, y más las pérdidas de vidas humanas son lamentables, se respeta a los ciudadanos. Ya no hay aquello que decía Calderón de que ‘vamos a declarar la guerra, y de una vez les informo que puede haber daños colaterales’; afortunadamente no hay daños colaterales, aunque sentimos todas las pérdidas de vidas”, puntualizó.

La sociedad en su conjunto ha satanizado a este que calificó “el maldito sexenio del narco jefe de la mafia de Palacio Nacional”, toda vez que de forma por demás impúdica, el #NarcoPresidenteAMLO reiteró que sus “amigos”, aparte de ser “humanos”, los narcotraficantes son “personas respetuosas” (¡sí, hahaha…!)En este contexto, existen cientos de casos documentados que los mexicanos están secuestrados en sus ciudades porque temen que en las carreteras sean víctimas de asaltos o asesinatos a mansalva, sin la intervención de la Guardia Nacional, que conforme a su existencia como “institución contra el crimen”, sirve para dos cosas…, que de hecho, grandes líderes del narco están “a salvo” con el Gobierno de Andrés Manuel López Obrador, cuyo sexenio está marcado como “narco-maldito-narco”.

Para estar acorde a la degradación policiaca, salió en redes sociales otro narco-video, producto de la inestabilidad que sufre toda la Nación y el #NarcoPresidenteAMLO, incurriendo en el delito de Omisión de Estado, la protección de los barones del narcotráfico.

En el post surgido del Centro Noticias Oaxaca, se advierte a través del Hashtag “El Gob. de #Oaxaca, @salomonj, cesó a tres altos mandos policiacos tras la difusión de un video que presenta un "narcocorrido" en honor a la Unidad Policial de Operaciones Especiales (UPOE)”. El video viralizado muestra escenas en espacios públicos y con vehículos oficiales. (https://twitter.com/CentroNoticiasO/status/1783569607497863416)

Y para no variarle, la escrupulosa escritora Anabel Hernández, está próxima a editar un nuevo libro que intitula “La Historia Secreta, AMLO y el Cártel de Sinaloa” (Grijalbo). En la víspera, la periodista mexicana, en un mensaje por la plataforma “X”, le advirtió al Ejecutivo federal: “No se ponga nervioso Sr Presidente, esto apenas está comenzando”. https://twitter.com/alpeca/status/1783909775937245374/video/2

Al respecto, Nery Córdova Solís, investigador y director de la revista Arenas de la Facultad de Ciencias Sociales de la UAS, en su libro La narco-cultura: simbología de la transgresión, el poder y la muerte (2011), alertó que el fenómeno social del "narco" como fenómeno histórico, experimentado, visto y sobre todo vivido por una población, particularmente la sinaloense, es la trama fundamental que se teje en el presente ensayo, en el que destacan las peculiaridades de la gesta, el derrotero, el crecimiento y el fortalecimiento de lo que denominamos como "narco-cultura".

Desde los años "mozos" del cultivo de enervantes en el territorio "nodriza" de las drogas ilícitas en México, se empezarían a forjar y ampliar las configuraciones culturales e ideológicas en torno de lo que es hoy una actividad delictiva tan poderosa, que ha puesto en jaque no sólo al gobierno, sino a la sociedad y las instituciones. Este es un recorrido sobre la realidad, la efervescencia y el "mito" sociocultural del narcotráfico.

Es por ello que para el presidente Andrés Manuel López Obrador, frente a una descomunal “cosecha de dólares”, se ve limitado en ordenar a las fuerzas armadas mexicanas, avasallar a través de operativos especiales, el trasiego que representa el narcotráfico de México y América Latina.

En tanto que la cultura de los pueblos latinoamericanos no mejore sus estructuras de enseñanza en las aulas, y los gobiernos democráticos no ofrezcan alternativas de fuentes de trabajo, prevalecerá por siempre el tráfico de estupefacientes, en cuyo círculo de poder (a fuego y sangre, sin abrazos, pero con muchos balazos), los narcotraficantes profesionales prefieren agrupar ejércitos de jóvenes para fortalecer sus mercados.

Un chavo —cuya identidad se omite por cuestiones de seguridad personal—, carga en su mente acciones patéticas que se conjugan en lo inverosímil: “Viva rápido y muera joven”, para poder entrar a esta peligrosa espiral.

Otros imberbes se niegan a ser víctimas de estadísticas mortuorias o copartícipes de la venta y distribución de drogas, porque “yo no quiero ser cola de ratón” y mucho menos “ver a mis padres llorar encima de mi féretro”, todo por una bonanza del lavado de dólares fallida, tan fallida como el gobierno del presidente López Obrador.  

Pero en esa dualidad de ideas, la estrategia del narcotráfico va más allá de la estupidez de quienes creen que saldrán de pobres, toda vez que Nery Córdova Solís subraya: “Ha sido tan significativo que el narcotráfico sinaloense (que) creó a su primer Santo, en lo que constituye un caso inédito en el mundo: Jesús Malverde”.

Según Wikipedia, Jesús Juárez Mazo y/o Jesús Malverde Campos (Culiacán, Sinaloa, 24 de diciembre de 1870-Culiacán, Sinaloa, 3 de mayo de 1909), conocido como Jesús Malverde o Malverde, fue un bandolero mexicano. Es venerado como un santo popular y se le considera como el patrón de los narcotraficantes.

Su estatus como santo se extiende principalmente por el territorio de Sinaloa. Se le han erigido varios santuarios de veneración: el primero fue construido en su natal Culiacán, otros se encuentran en ciudades sinaloenses como Badiraguato, o de la república como Tijuana, Ciudad de México, Oaxaca,​ y Chihuahua;​ fuera de México, también se le profesa culto en Colombia y los Estados Unidos.​ Gracias a las hazañas de bandolerismo por las que es acreditado, también se le conoce como el Bandido Generoso.​

Los relatos sobre su vida son muy variados, es imposible dilucidar qué aspectos son reales y cuáles son inventados. De acuerdo con las creencias, delinquía en los Altos de Culiacán durante la primera década del siglo XX.

Asaltaba y robaba a hacendados y familias adineradas de la región, entre los que se encontraron los Martínez de Castro, los Tarazonas, los Redo, los De la Rocha o los Fernández.​

Posteriormente, repartía el botín entre la gente pobre. Se afirma que la muerte por hambre de sus padres, víctimas de los abusos de los terratenientes, fue lo que le motivo a ello para salirse de los cauces legales.

Según la tradición, antes de huir al monte, Malverde podría haber sido albañil u obrero en el tendido de vías férreas. Se cree que habría trabajado en la obra del Ferrocarril Occidental de México y en el Ferrocarril Sud-Pacífico, línea que llegó a Culiacán desde el norte en el año 1905.

Sus asaltos a adineradas personas hicieron que el entonces Gobernador del Estado, el general Francisco Cañedo, compadre de Porfirio Díaz, ofreciera recompensa por su captura.

Perseguido por las autoridades, Malverde habría muerto el 3 de mayo de 1909. No existe acuerdo sobre la forma en la que murió: según algunas versiones, fue aprehendido por la policía, y “ejecutado en caliente”, como lo ordenaría el General Díaz en contra de sus enemigos canijos.

También se cuenta que un compañero lo traicionó para cobrar el dinero ofrecido por el Gobierno. La narración más extendida es que recibió una herida de bala en un enfrentamiento con las fuerzas de la ley que le produjo una gangrena.

Malverde, sabiendo que no sobreviviría y que la recompensa por su captura aumentaba, soportó mientras pudo antes de pedir a un amigo que lo entregara para recoger la recompensa y repartirla entre los pobres.

En torno a la figura de Malverde se ha desarrollado un culto sincrético que une creencias propias del catolicismo popular y otras que la Iglesia católica considera supersticiones, por lo tanto, muchas veces heréticas e idolátricas, que se entrelaza también con la imagen de San Judas Tadeo, el santo de las causas imposibles.

Al no haber sido aceptada por su Santidad por la Iglesia católica, y siguiendo la ortodoxia católica, normalmente no se le denomina santo a Malverde, sino "ánima", es decir, un alma.

La figura de Jesús Malverde ha ingresado en la religiosidad popular junto con figuras como la Santa Muerte, de la que se pueden también encontrar representaciones junto a las imágenes de Malverde. En general, el culto está fuertemente impregnado por los usos y costumbres del catolicismo, siendo un ejemplo de esto la celebración de novenas.

Desde el fallecimiento del bandido se forjó la reputación de una especie de Robín Hood que lo ha hecho popular entre la gente pobre de Sinaloa y los barrios bajos conde se comercializan los estupefacientes. Muchos solicitan su intercesión y se le han atribuido diversos milagros, curaciones y bendiciones,​desde devolver una vaca perdida a su dueño hasta la curación del cáncer.​

Tras su ejecución, hubo una proclama gubernamental prohibiendo la inhumación de los restos, quedando éstos a la intemperie y pendiendo de un mezquite​ a manera de escarmiento (según otras versiones, fue su cabeza la que se cortó y colocó en un árbol, a la vista de todos, como advertencia a sus partidarios).

Con el paso del tiempo, los restos cayeron al suelo. Fue cuando los habitantes del viejo poblado de Culiacán comenzaron a arrojar piedras para proteger el cuerpo,​pues aunque la restricción se aplicaba a un entierro en ningún lugar se prohibía "empedrar"; al colocar además cada persona una piedra por vez, nadie incumplía personalmente la prohibición. En la actualidad continúa la tradición de llevarle, además de flores o veladoras, piedras del lugar de origen de los devotos, como forma de rendir culto, cada 3 de mayo.

La acumulación de piedras creó un montículo que dio lugar a una tumba. Con la expansión de la ciudad de Culiacán, la tumba fue destruida y los huesos de Malverde trasladados a una capilla.

El sepulcro de Malverde atrae a miles de devotos cada año. Muchos dejan velas u otros objetos asociados con sus vidas, y algunos pescadores dejan camarones en alcohol en agradecimiento por una buena pesca. Otras personas dejan fotografías de aquellos que necesitan ayuda. Cuando algún milagro tiene lugar, vuelven a agradecerlo a Malverde, a menudo dejando placas que lo conmemoran.

La fuerza popular no tiene fronteras, pero sí creencias, al grado que los compositores surgieron de la nada, que hasta generaron “La Oración de Jesús Malverde, para protección y ayuda”.

 

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