El presupuesto 2023, que envía el gobierno al congreso de la CDMX favorece rubros de no relevancia

. EDMUNDO OLIVARES ALCALA …………………………………….

El paquete económico presentado por el Gobierno de la Ciudad de México es regresivo en varios aspectos, no tiene criterios claros sobre la distribución presupuestal asignada a las diferentes alcaldías y castiga rubros como la movilidad, la salud, la protección civil y el trabajo.

La Diputada Luisa Gutiérrez Vicepresidenta de la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública declara lo anterior e indica que

Acción Nacional señala con preocupación que dicho proyecto, en varios rubros, no responde a una concepción de ciudad de vanguardia que reconozca como brújula toral la consecución de derechos fundamentales, sino a criterios políticos que ponen en riesgo ciertos derechos que se consideraban ganados.

Ante el deterioro sistemático del transporte público y el aumento considerable de las muertes de ciclistas, es alarmante que dicho paquete contribuya a mantener el paradigma del uso del automóvil en detrimento del transporte masivo seguro y de calidad.

Como ejemplo sintomático, para el Fondo del peatón y ciclista se destinan 793 mil pesos, mientras que para reencarpetamiento de calles se destinan 3600 millones de pesos.

Aunado a ello, el presupuesto para la Red de transporte de Pasajeros presenta una disminución del 20%, y el Sistema de Transportes Eléctricos, otrora ejemplo exitoso de movilidad, una reducción de hasta 43%. Por otro lado, el Sistema Colectivo Metro que se derrumba día con día, con esfuerzo alcanza el irrisorio 0.1% de incremento con apenas 19 millones de pesos.

Para el gobierno de la Ciudad de México la seguridad de los usuarios en una ciudad donde aproximadamente el 70% de las personas utiliza transporte público, no merece más que una asignación presupuestal pírrica, ridícula.

Claudia Sheinbaum no se cansa de publicitar la política de movilidad de la CDMX como uno de sus grandes logros, sin embargo, la Secretaría de Movilidad apenas tiene un incremento de 0.29%, 6.7 millones de pesos que a todas luces son insuficientes para las necesidades de una de las ciudades más importantes del mundo.

Por otro lado, a pesar de que el gobierno actual se ha jactado de que el sistema de salud eventualmente se parecerá al de Dinamarca o Suecia, los datos son contundentes. La Secretaria de Salud tendrá apenas un incremento del 0.23%, un aumento de 31 millones de pesos con el que difícilmente se puede hacer frente a los problemas de salud en una ciudad con brechas sociales marcadas y precarización progresiva atenuada por una pandemia.

La pandemia destruyó una cantidad considerable de empleos, generó a la luz de las cifras más conservadoras, al menos tres millones de nuevos pobres. La Ciudad de México no ha logrado una reactivación económica sostenida, y a pesar de ello esta administración disminuye en 12% el presupuesto para la Secretaría del Trabajo y Fomento al empleo.

Por otro lado, lo más alarmante frente al castigo presupuestal y los incrementos a cuenta gotas en rubros cruciales, es que el austericidio de este gobierno simplemente es una fachada para desviar los recursos a la campaña ilegal y anticipada de la jefa de gobierno.

El rubro denominado “Servicios de comunicación y publicidad” presenta un incremento de 88.3% respecto de 2022. En contraste con 2022 en el que el monto ascendía a 400 millones de pesos, para 2023 se plantea una cifra de 753 millones de pesos.

El paquete económico de 2023 tiene avances en algunos temas, sin embargo, es insuficiente y particularmente regresivo en los puntos señalados. Por ello, desde Acción Nacional exigimos un presupuesto más acorde con la realidad en el que se apueste por la consolidación de derechos y no por el retroceso. Es impensable que podamos ofrecer una vida digna, condiciones de vida más equitativas y un piso común desde el cual millones de mexicanos puedan salir de la pobreza, si los criterios de este gobierno siguen siendo políticos en el peor de los sentidos.

Insistiremos en un presupuesto digno que coloque en el centro a las personas, sus derechos y la posibilidad de construir una Ciudad de México a la altura de las necesidades y deseos de millones de capitalinos. A la dignidad humana no se le regatea.

La jefa de gobierno se equivoca profundamente si cree que el presupuesto de la Ciudad de México le pertenece”.