La ASCDMX, nuevamente sobresale por sus conflictos laborales

. EDMUNDO OLIVARES ALCALA. ……………

La Auditoría Superior de la Ciudad de México, que forma parte del congreso de la ciudad de México, en su calidad de órgano técnico auditor, adeuda a los trabajadores y empleados, el incremento al salario y prestaciones del año 2024-

El Comité Ejecutivo General del Sindicato de Trabajadores de la Auditoría Superior de la Ciudad de México solicita a las altas autoridades federales y capitalinas, así como las legislaturas locales, entrantes y salientes, intervengan y corrijan esta injusticia, y se otorgue de inmediato el incremento salarial.

Hasta el momento, indican los quejosos, se ha privilegiando el diálogo respetuoso, la negociación abierta y la colaboración reciproca con las autoridades institucionales, se han resuelto satisfactoriamente infinidad de diferendos y conflictos laborales, y la relación de trabajo, colectiva o individual, entre la auditoría superior de la ciudad de México (ASCM), y los trabajadores sindicalizados, se han sujetado, irrestrictamente, a las condiciones generales de trabajo (CGT).

Sin embargo, a la fecha, la auditoría superior de la ciudad de México, que forma parte del congreso de la ciudad de México, en su calidad de órgano técnico auditor, nos adeuda el incremento al salario y prestaciones del año 2024.

Desde noviembre de 2023, el sindicato le solicitó al titular de la dependencia incluir en el proyecto de presupuesto institucional 2024, los recursos necesarios para el pago de salarios y prestaciones ordinarias, así como prever el incremento a estos rubros para el ciclo anual que transcurre, por tal motivo, a lo largo del año actual, se han realizado varias reuniones bilaterales para negociar dicho incremento.

Todo  ha resultado infructuosas, porque las autoridades institucionales adoptaron y se mantienen en la posición indebida de que los trabajadores deben aceptar el congelamiento o la disminución permanente de sus sueldos y prestaciones laborales, como una contribuición solidaria con las políticas de austeridad republicana.

Dicha austeridad fue ordenada exclusivamente para disminuir los salarios y privilegios exhorbitantes de los altos funcionarios y evitar el dispendio en la adquisición de bienes y servicios no prioritarios en las dependencias, pero jamás para afectar las partidas del capítulo 1000, destinadas al pago de salarios y prestaciones de los trabajadores sindicalizados y operativos.

Estos rubros se mantienen intocables, por estar considerados como un gasto esencial e irreductible, derecho laboral universal ampliamente protegido por el artículo 123 apartado b de la constitución federal, así como por su ley burocrática reglamentaria y por las condiciones generales de trabajo de la auditoría superior de la ciudad de México.

A pesar de que esta política protectora de los salarios de la clase trabajadora, se ha cumplido y aplicado puntualmente en todas las instituciones públicas de la ciudad de México, en una actitud retrógrada, a quienes laboramos en la auditoría superior, de manera injustificada. Los afectados señalan que les niegan este derecho,

El presidente Andrés Manuel López obrador, ha expresado reiteradamente, a lo largo de su mandato, que el salario de los burócratas es intocable, y por parte de la presidenta electa Claudia Sheinbaum Pardo, en su discurso pronunciado el 15 de agosto, ante el tribunal federal electoral, afirmó que la cuarta transformación concibe como un derecho y no como un privilegio el salario justo, pero en los hechos es todo lo contrario.

Inclusive ,el SITASCM, considerando que el monto del presupuesto asignado a la dependencia para el año 2024 fue prácticamente el mismo que en 2023,  propuso que, en reflejo de esta situación, se nos otorgara el mismo porcentaje de incremento que se nos concedió el año pasado, por un monto del 5% lineal considerando  prestaciones, sin embargo, el titular, designado por la actual legislatura, de manera arbitraria mantiene la postura inamovible de que por la limitación presupuestal, los trabajadores son quienes deben de sufrir las consecuencias y aceptar un incremento simbólico por debajo de la inflación, lo cual contraviene el mandato constitucional de que a trabajo igual se debe otorgar un salario igual, colocándonos en una posición discriminatoria de empleados de segunda, hecho que contradice la proclama de la cuarta transformación de construir un México de bienestar y derechos para todos.

Aseguran los demandantes que en varias ocasiones acudieron a las diversas instancias del Congreso de la Ciudad de México, solicitando su intervencion, bajo la consideración de que formamos parte de la plantilla general del mismo, sin embargo, han mantenido una actitud de silencio ante nuestros reclamos.

Como una burla de los diputados salientes, éstos se autorizaron un bono de dos millones y medio de pesos para cada legislador, y a los trabajadores asignados directamente al congreso, también se les concede una gratificación por fin de legislatura por un monto de quince mil pesos que tienen considerada en condiciones generales de trabajo, hecho que demuestra que el rasero con el cual tratan a los trabajadores que están cerca de ellos, es diferente a quienes estamos fuera del recinto legislativo, demostrando que la igualdad laboral, social y política que predican es solo de palabra y no se corresponde con los hechos, como es nuestro caso.