PESQUISA POLITICA

PRIMERA DE TRES PARTES

Comedores de la comunidad, otra caja chica del Gobierno de CDMX. El Programa de Comedores de la Comunidad, se convirtió en la caja chica de la Secretaría de Desarrollo Social (SEDESO), del Gobierno de la Ciudad de México (GCDMX), y retiene cerca de 300 millones de pesos, destinados que eran destinados para este programa.

Documentos en poder de este medio de información dan cuenta que el dinero no se entregó a los administradores de los Comedores Comunitarios, porque, supuestamente, fueron destinados para apoyar a contener la pandemia del Covid-19.

Recordaremos que, supuestamente, los Comedores Comunitarios son espacios incluyentes en donde se fomenta la relación familiar y social, la sana convivencia y la participación de la comunidad, además de promover hábitos saludables entre sus beneficiarios.

Estos lugares nacen de un compromiso social del entonces (Gobierno del Distrito Federal (GDF), ahora Gobierno de la Ciudad de México (GCDMX), para apoyar a la gente de pocos recursos económicos, niños y adolescentes de la metrópoli.

En su mayoría los Comedores Comunitarios son atendidos por mujeres quienes se esfuerzan, día a día, en proporcionar alimentos nutritivos a personas en situación de alta vulnerabilidad de la Ciudad de México, debe ser diario el derecho a la alimentación, Pero en la práctica, incluso es discriminatoria.

Los Comedores Comunitarios operan por medio de la SEDESO, y cada comedor cuenta con un promedio de 109 a 120 beneficiarios, quienes reciben dos raciones de alimento diarias.

Se involucra a la comunidad en la operación de los comedores, con ayuda del trabajo de alrededor de voluntarios, quienes sirven desayuno y comida a los beneficiarios.

En estos sitios se difunden y generan hábitos alimentarios saludables a través de pláticas y talleres dentro del Comedor

El menú es elaborado conjuntamente con instancias expertas en la materia, como el Instituto Nacional de Nutrición, incluyendo ingredientes locales

El 85% del costo lo absorbe el gobierno federal y hay una cuota de recuperación que va de $ tres a $10 pesos por comida, dependiendo la región.

Mensualmente, las autoridades correspondientes deben de abastecer una parte importante de los productos no perecederos, que se complementan con productos perecederos que se abastecen localmente, pero nada de ello se cumple.

De acuerdo a la investigación realizada por este medio de información, el deber de los gerentes de los Comedores Comunitarios es atender a todas las personas que acuden diariamente a consumir sus sagrados alimentos y no negarle a nadie el apoyo.

El programa se encuentra “alineado” con la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos. Titulo primero. Capítulo, de los Derechos Humanos y sus garantías, Artículo cuarto.

De acuerdo a las reglas de operación, emitidas en la gaceta oficial de la Ciudad de México, para el ejercicio fiscal 2021, se debe de trabajar con el mayor grado de transparencia, legalidad entre otros valores, pero como suele suceder, la corrupción ésta por encima de dichas reglas, ya que el 70 por ciento de éstas son violadas, por las autoridades de la SEDESO.

Con el pretexto de la pandemia del Covid-19, durante el 2021, se vivieron situaciones de inconsistencias en la aplicación del programa a los “Comedores Sociales” de la Ciudad de México.

La Gaceta Oficial del 21 de diciembre de 2020, a la letra señala que se nos debe de brindan una guía, pero ésta, en la práctica confunden y afectan, ya que dan duplicidad en la operación de los mismos.

Hay desorden y contradicen el derecho a la alimentación, misma que ha estado dañando la transparencia y confianza al programa, violando la Gaceta Oficial, que señala; “toda persona tiene derecho a una alimentación adecuada, diaria, suficiente y de calidad.

Sin embargo se contrapone a lo dispuesto en la dirección de comedores que, por un lado, dicen en las reglas de operación vigentes que debe ser diario el derecho a la alimentación, pero en la práctica, incluso, es discriminatoria.

Las autoridades de la SEDESO del Gobierno de la Ciudad de México, a través de una circular, pidieron que se debe de cerrar el servicio de alimentos en diciembre, esto con el fin de no entregar el apoyo económico destinado a los comedores.

Hubo contradicción en las circulares, ya que unas dicen diferentes fechas. A unos administradores les indicaron que el cierre sería a partir del día 17, a otros les marcan el día 24 y en otro documento, señaló el día 27 de diciembre, las reglas de operación no son para todos.

Nunca se dio a conocer, qué criterios utilizan las autoridades correspondientes para manejar cierre de comedores, por las diferentes fechas.

Lo peor de todo fue, por medio de un oficio se dio a conocer que no hay presupuesto destinado a los Comedores Comunitarios, por causa de la pandemia del Covid-19, cuando es un recurso ya etiquetado.