top of page

Urge una legislación con modelo humano y profesional médicos  residentes e internos




Miles de doctores de la República Mexicana, del IMSS, ISSSTE, SSA entre otros, son explotados laboralmente, obligados trabajar hasta 36 horas interrumpidas, hostigados y amenazados de ser despedidos si no cumplen lo establecido.

Los galenos, al ser entrevistados por el Portal Revista, “Cuestión Chronos”, dieron a conocer que al acudir a los hospitales corren un verdadero peligro, ya que se tienen que presentar a diferentes horas de la noche, y quedan expuestos a ser víctimas de la delincuencia organizada.

Las mujeres han sido blanco de estos grupos criminales, quienes en ocasiones las secuestran, las violan en corren el peligro de ser asesinadas. Aunque se presente la denuncia las autoridades correspondientes nada hacen.

Algunas empresas particulares, contratan autobuses para trasladar a sus empleados a sus domicilios o a recogerlos de los mismos, cuando el personal trabaja de noche, en cambio a los doctores del IMSS, del ISSSTE, los abandonan a su suerte.

Los galenos, omitimos sus nombres por razones obvias, aseguraron que están olvidados por las autoridades federales, y aunque sabe perfectamente de la explotación laboral a que son sometidos, nada hacen sino todo lo contrario.

Explicaron que los doctores, enfermeras, camilleros, y demás personal de los hospitales y clínicas tienen derecho a trabajar ocho horas y no hasta 36 horas ininterrumpidamente, que por lo general sucede, por falta de personal médico.

Asimismo, a una alimentación de calidad; un lugar de descanso digno, después de realizar una operación; mejorar salariales de los jóvenes médicos; contar con apoyo y asesoría legal y sancionar con cárcel a quien abuse, hostigue y obligue a laborar más de ocho horas a los médicos residentes.

En estos momentos los médicos residentes llegan a trabajar hasta 100 horas/semana, por lo que se debe regularse por seguridad de los pacientes. Y salud de los jóvenes médicos. Exponiéndose a contraer enfermedades físicas y mentales.

Mientras la mayoría de los mexicanos duermen por la noche jóvenes médicos son sometidos a jornadas de trabajo de más de 36 horas continuas sin descanso, ni derecho a dormir. 

El internado y la residencia médica son eternos años de períodos prolongados de ayuno, de interminables guardias, de trabajos forzados, de privación del sueño y de constante aplanamiento del ego y la moral.

Existe la suficiente evidencia científica que establece que trabajar veinticuatro horas o como trabajan actualmente 36 horas continuas origina una des-sincronización de las funciones corporales, ya que los seres humanos somos seres diurnos que estamos programados para desarrollar actividades durante el día y recuperarnos de la fatiga durante la noche.

Lo cual se traduce en afectación a la salud y desempeño y provoca hipertensión, daños cognitivos, cerebrales, cardiacos, metabólicos, depresión, etc., por el grado de estrés al que están sometidos.

Estudios de la oficina de la OIT, James Carpentier; P Cazamian han revelado que esta forma de someter a la persona a no dormir se experimenta una sensación de descontento y aislamiento, que algunos han calificado incluso de verdadera «muerte social”.

Muerte social. Porque además de las repercusiones fisiológicas a su salud enfrentan un problema grave en el ámbito familiar, social y laboral.

Al verse perturbada la célula familiar con los horarios poco usuales que impone, existe una oposición de fase entre los horarios de trabajo, ahora nocturnos, y los horarios socio familiares, que continúan siendo diurnos.  

Un hombre obligado a trabajar de noche y dormir de día deberá hacer frente a una doble exigencia, pues debe trabajar en estado de desactivación nocturna, desactivación cerebral y el sueño lo que lo obliga a realizar un esfuerzo suplementario para ejecutar la misma tarea, y dormir en estado de activación diurna, lo que disminuye la calidad del sueño y su poder reparador.

Si a todo esto sumamos los efectos que la desincronización horaria tiene sobre el equilibrio de su vida social y familiar, podemos asegurar que los trastornos que sufre el trabajador nocturno son la consecuencia del triple conflicto biológico, laboral y socio-familiar al que está sometido.

Debe reducir los años de residencia médica y la cantidad de guardias que los someten. Ya que aproximadamente están realizando 120 guardias al año con las mismas características de treinta y seis horas sin descanso, ni derecho a dormir.

Deben hacerse algunas modificaciones a la Ley General de Salud y a la Ley Federal del Trabajo, adicionar a los artículos 87 y 95 de la Ley General de Salud y reformar el 353-E de la Ley Federal del Trabajo, para garantizar “jornadas médicas dignas” en el proceso de formación de profesionales de la salud, con lo cual sus turnos laborales no deberán exceder de ocho horas en la mañana y siete por la noche.

 “El trabajo de los médicos residentes en hospitales es como una esclavitud moderna, porque laboran mucho tiempo, más de 36 horas continuas ganan poco y llevan un estrés bastante fuerte”.

La senadora del PT, Geovanna Bañuelos se ha manifestado a favor de los derechos laborales y humanos de los médicos residentes.

A lo cual presentó una iniciativa de reformas a las leyes General de Salud y Federal del Trabajo. Agrega que “El panorama actual tiene tintes de explotación laboral contra quienes se preparan en especialidades médicas, ello es causa de deserción de los estudios de especialidad, depresión y ansiedad.

Afirma que los maltratos recurrentes, la discriminación, hostigamiento laboral. Acoso sexual. Jornadas excesivas de trabajo, así como falta de atención a sus denuncias, castigos con jornadas mayores a las establecidas en el reglamento o con guardias extras.

“Necesitamos cumplirles a estos mexicanos que tenemos abandonados, que los estresamos y ponemos en riesgo su salud. Incluso ha aumentado el número de suicidios y nosotros permanecimos inmóviles”.

Maltrato y desgaste profesional en médicos residentes en México Violencia en residencias médicas, una cuestión de vida o muerte.

Hostigamiento y acoso sexual a cambio de permitir los médicos ginecólogos en el Hospital General de Zona 71 en corazón del Puerto de Veracruz hacer

El pasado 22 de mayo se dio a conocer en los medios de comunicación el suicidio de Zyanya Estefanía, médica residente de primer año (R1) en el Hospital del Niño Poblano (HNP).

De acuerdo con versiones de sus allegados, Zyanya era víctima de maltratos en dicho hospital, lo que consideran pudo orillar a tomar esa decisión.

 Hay que recordar que el maltrato (bullying / mobbing) y el desgaste (burnout) profesional en médicos residentes en México y el extranjero están bien documentados en diversas investigaciones científicas.

Comments


DIRECTORIO

Lic. Fernando González Parra

Director General

Mtra. Graciela Ornelas Prado

Directora

Edmundo Olivares Alcalá

Subdirector

Karen García Hernández

Jefa de Redacción

Héctor Manuel Serna Ornelas.

Juridico

Pablo Gómez

Articulista 

Ernesto Olmos Avalos.

Alitzel Herrada Herrera.

Garnica Muñoz José Antonio.

Reporteros

Adonay Samoya H.

Lic. Andrés Aguilera.

Roberto Chavez.

Renato Corona Chavez.

Javier Méndez Camacho.

Gustavo Santos Zúñiga.

Blas. A Buendía

Lic. Alicia Barrera Martínez

Columnistas

  • Icono social Twitter
  • Wix Facebook page
bottom of page