Épocas de crisis, es cuando resulta más útil la representación popular

El poder legislativo en materia presupuestal tenía tres facultades: la de la aprobación del presupuesto; la supervisión del gasto público, y la opinión para transferir partidas presupuestales entre las dependencias y entidades del sector público, esta última facultad fue acotada en caso de pandemia, es decir, al Congreso lo dejaron sordo y mudo para opinar en transferencias presupuestales en emergencia sanitaria, lo que consideramos un despropósito, en épocas de crisis, es cuando más útil resulta la representación popular,

Lo anterior fue manifestado por el Diputado del Grupo Parlamentario del Partido de la Revolución Democrática, en el Congreso de la Ciudad de México (CCDMX), Jorge Gaviño Ambriz, durante la entrega del proyecto de presupuesto 2022.

Al dirigirse a la maestra luz Elena González Escobar, la titular de la Secretaría de Administración y Finanzas, el congresista indicó que el diálogo entre poderes es fundamental. Sin embargo, su presencia en este recinto, a nuestro juicio, hubiera sido mucho más fructífera, si hubiésemos tenido con antelación el paquete económico para el ejercicio 2022, que el día de hoy nos entrega.

Recordó que en las elecciones pasadas, recibieron un mandato de la ciudadanía claro y contundente, traer a este recinto las opiniones de la pluralidad y las diversas ópticas y modos de entender la realidad de los grupos y de los ciudadanas y ciudadanos que componen nuestra compleja Ciudad de México.

“Llegamos a la segunda legislatura, con facultades disminuidas producto de la reforma que el ejecutivo envió al primer Congreso y que éste realizó a nuestra legislación”, dijo.

Dijo que el contenido del paquete económico para 2022 es crucial para impulsar la reactivación económica de la Ciudad de México, y explicó que el día de ayer el INEGI publicó la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo y la Ciudad de México presenta la tasa de desocupación más alta a nivel nacional con 6.9% mientras el promedio a nivel nacional asciende a 5.3%.

Pidió que estas cifras se reviertan durante 2022, y para ello este paquete es una herramienta indispensable pues ya sea a través de políticas públicas, incentivos fiscales o bien inversión pública debe coadyuvar a detonar el empleo.

Esperamos un paquete presupuestal que tenga como centro la recuperación del empleo y abatir las crecientes cifras de pobreza. Según datos de CONEVAL de 2018 a 2020 la CDMX pasó de 30 a 33% de población que se encuentra en situación de pobreza.

Actualmente 3 millones de capitalinos son pobres. Una cifra lamentable, no hemos podido revertir las inercias que nos llevan a una polarización económica agobiante, en donde cada vez los ricos son más ricos y cada vez hay más pobres, con una pobreza más extrema, la política social emprendida por este gobierno ha sido insuficiente.

Pidió apartarse de la frivolidad y uso clientelar, de cualquier signo político y de cualquier color partidista.

Esta ciudad afronta los gastos de ser la sede de los Poderes de la Unión. Por ello, desde 2014 en el Presupuesto de Egresos de la Federación se le asignaba una partida denominada Fondo de Capitalidad. De 2014 a 2018 anualmente, la ciudad recibió entre 1,250 a 4,000 millones de pesos.

Sin embargo, para 2019 el Gobierno Federal decidió suprimir dicha partida sin que la administración local ni este Congreso se pronunciaran al respecto. Estamos en un silencio sepulcral.

Lo mismo sucedió con el Fondo Metropolitano, la ciudad se ve afectada y el silencio reina.

El Gobierno Federal no debe tratar como dependencia a la Ciudad de México, somos una entidad republicana y democrática y con esa misma lógica el Gobierno local debe tratar a las alcaldías.

De igual manera, es relevante destacar la caída que durante esta administración se ha tenido en gasto de capital, es decir, hay menos obra pública en esta ciudad.

Para 2019 este gobierno tuvo un gasto de 53 mil millones de pesos, en 2020 de 50 mil millones de pesos y para 2021, según el propio cierre estimado, solo alcanzaría los 41 mil millones de pesos.

Lo que sí creció es el gasto corriente. En 2019 este monto ascendió a 162 mil millones de pesos, en 2020 se mantuvo sin cambios y en 2021 ascendió a 186 mil millones de pesos.

Es indispensable que las Alcaldías cuenten con los recursos necesarios para su operación, para ofrecer servicios públicos de calidad. En 2001 las Alcaldías recibían el 20% del presupuesto de la Ciudad. En el presente año sólo reciben el 17%.

La autonomía financiera de la Ciudad se ha venido perdiendo en el paso de los años. Entre 1990 y 1999 los ingresos propios del Distrito Federal constituyeron casi la mitad de los ingresos de la entidad. Esta participación cayó entre 2000 y 2006 a 43.4 % y entre 2007 y 2012 a 40.2 %. En la comparecencia de este año, de nuestra hoy invitada, se dijo que actualmente es del 40 %.

Es muy importante que los órganos autónomos reciban un trato presupuestal digno y suficiente, al estar recibiendo a los titulares de varios de ellos ante las comisiones unidas de presupuesto y hacienda, nos han hecho llamados desesperados por falta de recursos subrayando déficit en sus finanzas que comprometen su funcionalidad.

Durante el tercer trimestre de 2021 se registró una fuga de capitales de 14 mil 596 millones de dólares, lo que representa la segunda peor caída desde 1980, según las estadísticas que publicó el día de ayer el Banco de México.

Difícil en verdad será el ejercicio presupuestal del año que entra porque a todas luces será insuficiente, todo esto se enmarca en más de 7% de inflación anual que es la mayor inflación de los últimos 20 años, es la mayor pérdida del poder adquisitivo desde 2001, basta un solo ejemplo, la tortilla cuesta en la Ciudad de México un promedio de $18 pesos el kilo, lo que representa un incremento de más del 30% con respecto a noviembre del año pasado.

Se debe transparentar la asignación de recursos sobre todo a las alcaldías, el artículo 21 de la Constitución Política de la Ciudad de México dispone textualmente.

“El Congreso de la Ciudad de México expedirá las normas correspondientes en materia hacendaria, las cuales establecerán los criterios y fórmulas para la asignación presupuestal a las demarcaciones territoriales, de conformidad con lo siguiente: a) Para la asignación del gasto público se considerará: población residente y flotante; población en situación de pobreza; marginación y rezago social; extensión territorial, áreas verdes y suelo de conservación; inversión en infraestructura, servicios públicos y equipamiento urbano, así como su mantenimiento”.

Ante esta omisión de parte de este Congreso, de manera unilateral la Secretaría en el propio Presupuesto de Egresos determinó una fórmula, la ponderación de cada uno de los factores ha sido a su arbitrio.

Persiste la omisión de la mayoría de esta soberanía, ojalá podamos resolverla pronto, Mtra. Luz Elena González cuente usted con el PRD para hacer más eficiente su ardua tarea. Le deseamos muchos éxitos en la recaudación, distribución y aplicación del gasto público